Y si hay que hablar de arquitectura existen dos nombres que son altamente representativos y referenciales de lo que la Real Academia Española define como el “arte de proyectar y construir edificios . Se trata de Oscar Niemeyer y Paulo Mendes, figuras claves en la construcción del Brasil contemporáneo.

Catedral Metropolitana Nossa Senhora Aparecida
Fue precisamente Niemeyer quien junto a Lucio Costa (cabeza del proyecto urbanístico) en los años 60, desarrolló Brasilia, capital federal del Brasil y sede del Gobierno. Este revolucionario arquitecto, fallecido en 2012 a los 104 años, es el genio tras edificios como el de la Catedral Metropolitana Nossa Senhora Aparecida, el Congreso de Brasil, el Palacio del Planalto (sede del poder ejecutivo) y el Palacio Alvorada (residencia presidencial).
“El poeta de la curva , como se le conoció a Niemeyer, hizo también El Museo de Arte Contemporáneo de Niteroi -una suerte de platillo volador en Río de Janeiro- y formó parte del equipo que diseñó la Sede de la Organización de Naciones Unidas, en Nueva York. Se calcula que desarrolló cerca de 600 proyectos en su Brasil natal y en países como Francia, Alemania, Gran Bretaña, Italia y Argelia.
Sobre su gusto por las curvas, Niemeyer decía: “No es el ángulo oblicuo que me atrae, ni la línea recta, dura, inflexible, creada por el hombre. Lo que me atrae es la curva libre y sensual, la curva que encuentro en las montañas de mi país, en el curso sinuoso de sus ríos, en las olas del mar, en el cuerpo de la mujer preferida. De curvas es hecho todo el universo, el universo curvo de Einstein .
Esas curvas siempre estuvieron y así lo atestiguan algunos de sus últimos diseños, como el del Museo de Pelé, cuyos trazos fueron presentados en 2010.

En 2010, Pelé y Oscar Niemeyer revisaban los diseños de lo que sería el Museo del Ídolo
Otro de los promotores de la arquitectura moderna del Brasil es Paulo Mendes de Rocha, quien hoy tiene 85 años y fue el responsable de destacadas construcciones en Sao Paulo, como el Museo Brasilero de Escultura (MUBE), la Capilla de San Pedro Apóstol– ubicada junto al Palacio Boa Vista, la residencia del Gobernador del Estado y el Pórtico de la Plaza del Patriarca.
Mendes de Rocha brilló desde muy joven y a los 30 años se catapultó tras ganar el concurso para diseñar la sede del Club Atlético Paulistano de Sao Paulo.
Al igual que Oscar Niemeyer -en 1988- Paulo Mendes de Rocha también ganó el Premio Pritzker, en 2006, uno de los reconocimientos más prestigiosos en cuanto a arquitectura se refiere en el mundo y que se otorga a quienes hayan contribuido al enriquecimiento de la humanidad a través de sus obras.
Por Juan Carlos Lasso F.