Por: Ángel López
Tras la firma de los acuerdos de paz en el 2016, se creó el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR). Asimismo tres entidades nacen para darle claridad a las víctimas sobre justicia, verdad y familiares desaparecidos en el marco del conflicto armado. Cada una con su mandato, despliegue territorial y líneas de acción específicas, sin embargo, con condiciones diversas.
La Justicia Especial para la Paz - JEP satisface a las víctimas con el derecho a la justicia, La Comisión de la Verdad - CEV con el derecho a conocer las hechos y contribuir con la no repetición y la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas - UBPDD en la búsqueda humanitaria y extrajudicial de familiares. Estas tres en el contexto y debido al conflicto armado.
¿Qué papel juega la verdad en este sistema?
Para estas entidades es crucial. La justicia, la verdad y el paradero de los familiares desaparecidos, sólo serán posibles si se edifica desde ella. La sociedad colombiana rechazará los actos violentos y liderará la no repetición de estos si la verdad profunda logra esclarecer, ¿Quiénes fueron?, ¿Por qué lo hicieron?, ¿Cómo se beneficiaron?
Los mandatos de las tres entidades tienen temporalidades diversas. La Comisión de la Verdad de tan solo 3 años, tiene el reto de entregar en el 2021 un informe final donde pueda contar la historia del conflicto armado en Colombia desde el 58 hasta la firma de los acuerdos de paz. Testimonios de víctimas, victimarios y terceros civiles que hicieron parte del conflicto armado interno, serán parte de los insumos para este gran documento que será entregado en agosto e impreso en diversos formatos y divulgado a los ciudadanos a través de medios de comunicación masiva.
La investigación avanza y los informes preliminares también. En diciembre del 2019 se entregó el primer balance del análisis, en mayo de 2020 se entregará un segundo adelanto. Para diciembre de 2020 se espera otra fase del análisis, sin embargo, solo se conocerán los resultados hasta el 2021 con la entrega oficial del informe al país.
Diana Trujillo, coordinadora territorial de la Comisión de la Verdad en Tolima, menciona la importancia de que este informe se pueda difundir: “Las comunidades rurales y locales deben apropiarlo, son ellas quienes le dan vida al mismo, no puede morir en las manos de unos pocos, este informe es para todo el país”, afirmó.
Antecedentes
En Colombia han existido varias Comisiones de la Verdad en diferentes momentos de la historia. Todas en general han tenido la misma misión y/o mandato, el cual es ayudar al esclarecimiento de los hechos de violencia, y diferentes actos que hayan transgredido los derechos humanos en el país.
Como todas las anteriores, la comisión actual tiene esa misma particularidad de nacer y desarrollar su labor durante contextos de violencia y de conflicto. Todas surgiendo en negociaciones con grupos armados ilegales. Es por ello por lo que esta entidad tiene diversos antecedentes a considerar como lecciones aprendidas.
Solo por mencionar, estas son algunas de las Comisiones que se han creado anteriormente en Colombia:
- Comisión Investigadora de las Causas de la Violencia, creada por el General Rojas Pinilla mediante el Decreto 0942 del 27 de mayo de 1958.
- Comisión de Estudios sobre la Violencia, en 1987, bajo la administración del presidente Virgilio Barco.
- Comisión de Superación de la Violencia, se creó después de la firma de los acuerdos de paz entre el Gobierno nacional y la guerrilla EPL y el Movimiento Quintín Lame, en 1991.
También existieron varias comisiones de derechos humanos y de casos concretos como la toma del Palacio de Justicia, la masacre de Trujillo y otras de orden nacional y regional. Todas ellas sirviendo de ejemplo para el trabajo de la Comisión creada en el actual Acuerdo de Paz entre las FARC-EP y el Gobierno de Juan Manuel Santos.
La Comisión de la Verdad se estructura de forma nacional, pero se articula territorialmente, creando nueve macrorregiones las cuales son: Caribe, Antioquia-Eje Cafetero, Magdalena Medio, Centro Andina, Nororiente, Pacífico, Sur Andina, Amazonía y Orinoquía.
En el caso del departamento del Tolima, este se encuentra dentro de la macro región Centro Andina, donde también están los departamentos de Huila, Cundinamarca y Boyacá.
En todo el país existen 22 oficinas que se han denominado ‘Casas de la Verdad’, las cuales son un espacio de ayuda y reconciliación para las víctimas y actores del conflicto armado en Colombia. La Casa del Tolima se encuentra ubicada en la ciudad de Ibagué, un espacio construido para el diálogo de las víctimas, victimarios, centros de pensamiento, artistas y ciudadanos que le apuestan a la no repetición del Conflicto Armado.
Región del Tolima
La coordinadora territorial de la Comisión de la Verdad en Tolima, Diana Trujillo, indicó que los procesos en el departamento han sido: entrevistas, recepción de informes, diagnósticos, tanto de organizaciones comunitarias como académicas y revisión de documentación. A la fecha van 507 entrevistas individuales, 23 entrevistas con enfoque étnico, 69 textos revisados, entre monografías, artículos e investigaciones concerniente al conflicto armado en Colombia, dos diagnósticos aportados por la comunidad, 4 informes de investigación y 7 entrevistas colectivas.
Más allá del enfoque a los municipios PDET, la Comisión ha abarcado un mayor espectro en su dinámica territorial. “Desde el punto de vista del esclarecimiento, la Comisión, más que territorios priorizó núcleos o problemas relacionados con el conflicto armado en el departamento del Tolima”, explicó el director del Centro de Estudios Regionales de la Universidad del Tolima, Andrés Tafur.
La Comisión de la Verdad territorial Tolima, Ha estado en 37 de los 47 municipios del departamento, esto en una revisión estratégica para la recopilación de los testimonios en los territorios que han vivido con mayor impacto la violencia.
El Tolima tiene una condición especial, al ser el territorio donde se originó una parte importante del conflicto armado en Colombia. Es así como la coordinadora Trujillo menciona el reto de esta región como génesis de la violencia, por ende, sus relatos son claves para esclarecer la verdad de la guerra en el país.
Otro aspecto importante de los procesos que se vienen dando en la región, es la pedagogía para la paz. Son 1.116 alumnos y docentes de 20 instituciones educativas en el departamento con las que se ha socializado desde esta territorial. También se han logrado dos Mesas Técnicas para la No Repetición del Conflicto Armado en los antiguos Espacios Territoriales de Capacitación y Normalización ETCR, El Oso, en Planadas e Icononzo, con la participación de 40 instituciones y 550 personas entre indígenas, campesinos, excombatientes y entidades internacionales.
“Para nosotros como ciudadanos y mujeres víctimas de un conflicto armado que nos llevó a la pérdida de familiares, es muy importante. Porque es de la manera más sensata y real; sabremos qué pasó, por qué fue y quién lo hizo. Como bien lo saben en estos territorios se vivió mucho la violencia, la desigualdad, pérdida de muchos seres humanos que aún no se sabe nada, es un derecho tanto para la víctima como para el victimizante. La Comisión de la verdad hace un buen trabajo acá en el territorio. En el ETCR se ha trabajado mucho sobre la verdad”, explicó Leonoricel Villamil, una de las líderes sociales del corregimiento de Gaitania.
Esta líder agregó también que la verdad, es importante como una manera de descubrir por qué la sociedad ha sido resiliente frente a tantos años de guerra, o como lo menciona Andrés Tafur, al decir que la verdad es esa posibilidad de imaginarnos una Colombia distinta, logrando saber los contextos, causas y factores de la violencia en Colombia.
Recordemos que la comisión es extrajudicial y no tiene ninguna consecuencia jurídica. Por ejemplo, si alguien sabe sobre un homicidio por determinada circunstancia y estuvo implicado, no tendrá ninguna sentencia jurídica por parte de la entidad, la verdad voluntaria es confidencial y tiene total custodia quien participe en ella.
La comisión no da información, no da datos de sus testimonios a ninguna de las entidades judiciales, por el contrario, la Comisión si puede solicitar a la JEP o comparecientes ante la misma, presentar su relato para aportar a los hechos históricos del Conflicto Armado, así lo indicó la coordinadora Trujillo.
“Este informe final es diferente a todo lo que ha hecho Colombia. Colombia ha hecho informes de memoria histórica muy buenos, los que no te imaginas, pero la Comisión tiene algo especial y es que va a generar recomendaciones de no repetición. Esa es la diferencia entre un informe histórico y el informe que entregará la Comisión al país”, dijo la coordinadora sobre lo que será el informe final por parte de esta entidad.
Luego de este informe se establece un comité especial para dar seguimiento a esas recomendaciones, que son líneas de ruta para ir construyendo la paz en Colombia.
El departamento Tolima ha logrado trascender los estigmas de la violencia, transformado y superado su historia de conflicto. Las estadísticas sobre casos de violación a derechos humanos o de asesinatos a líderes sociales, son solo algunos datos de una región que se abre paso a una sociedad en construcción de paz, reconciliación y no repetición.