Salud mental, estrés y vida laboral en medio de la pandemia

Por: María Camila Sánchez

Durante la pandemia, el estrés por evitar un posible contagio del Covid-19 y todo lo que implica el confinamiento, pueden resultar en un coctel peligroso para la salud mental. La cuarentena y la necesidad de trasladar la oficina al hogar, han sido retos para los cuales pocos estaban preparados y donde hijos, padres, colegios y empresas se han tenido que adaptar.

En Contacto Directo, Javier Orejuela, doctor en Psicología Social del Trabajo, especialista en Psicología Clínica y jefe del Departamento de Psicología de la Universidad Eafit, aseguró que ante la imprevista aparición del virus y las medidas de confinamiento, las personas no tuvieron oportunidad de prepararse física y emocionalmente, lo que ha provocado diferentes trastornos en la salud mental “al sentir que esta situación los supera”.

“El impacto del trabajo en casa está siendo negativo, porque no es la forma normal de vivir. Esta es una medida excepcional convertida en una imposición laboral (que se dio de manera improvisada), y que no tuvo un consentimiento por parte del empleado, lo que ha traído consecuencias en la salud mental. Hoy se presentan muchos síntomas como alteraciones del sueño, trastornos de ansiedad, depresión y afectaciones en sus estados de ánimo”, explicó

De acuerdo con Orejuela, trabajar en casa no significa estar confinado; distinción clave para entender que el confinamiento, agudizó problemas en la salud mental de muchos ciudadanos durante esta emergencia. Además, el que no haya sido una decisión consensuada o voluntaria, incrementa los niveles de estrés, especialmente en aquellos casos en donde se carece de la capacidad de autodisciplina, de autonomía y de los recursos técnicos.

¿Es el tiempo un amigo o un enemigo al estar en casa?

De acuerdo con una investigación realizada por la universidad de San Buenaventura y la Universidad Eafit, sobre el trabajo en casa durante el confinamiento, el tiempo se puede convertir en un aliado o un enemigo para el trabajador. “Nos dimos cuenta que, aunque puede ser aparentemente positivo para compartir con la familia, las actividades laborales se intensificaron y el tiempo no alcanza para hacer todo lo que hay que hacer”

Orejuela explicó que durante este periodo hubo una “compresión espacio-temporal” en la intimidad del hogar, lo que provocó que no haya una distinción clara del momento en el que se empieza a trabajar y cuando debe terminarse.

¿Cómo y por dónde empezar a distribuir de mejor manera el tiempo?

“Nosotros somos capaces de adaptarnos a cualquier cosa, somos adaptativos, así que al principio muchos estaban desesperados con esta nueva condición, pero ahora han aprendido a sortear esta circunstancia y a organizar mucho mejor su tiempo”. El doctor Orejuela recomienda los siguientes pasos:

1. Hay que reorganizar todo el sistema en la familia y establecer reglas.

2. Regular el tiempo: no trabajar más allá de las horas establecidas.

3. Consensuar con los jefes horarios, para que después de ciertas horas no establezcan nuevas responsabilidades.

4. Distanciarse psicológicamente del trabajo una vez concluya sus horas pactadas.

Si no se toma en serio la tarea de reorganizar las relaciones con el trabajo y la familia, se puede comprometer la salud física y mental. Es por eso que Orejuela brindó las siguientes recomendaciones para hacer más llevadero el trabajo en casa durante el confinamiento:

1. Evalúe y reconozca si está satisfecho con el manejo de su tiempo.

2. Si observa inconformidades al respecto, solicite el apoyo de la oficina de recursos humanos de su empresa para que lo acompañen y capaciten.

3. Organice sus tiempos de la mano con su jefe para evitar inconvenientes y malos entendidos.

“Se requiere de mucha flexibilidad por parte de los jefes, porque no se trata de una forma de trabajo calcada de la realidad; muchos esperan que a las 11 de la mañana todos respondan, pero posiblemente el trabajador esté haciendo el almuerzo para él y sus hijos”, dijo Orejuela.

Recomendaciones finales

Orejuela aseguró que se debe superar el estigma que muchos han puesto sobre las personas que requieren de ayuda psicológica y tomar medidas extraordinarias, así como lo ha sido este confinamiento:

- Que cada uno determine cuál es la manera en la que mejor se siente en el trabajo en casa.

- Pacte y negocie con su jefe la manera en la que se siente más a gusto para trabajar.

- Acérquese a la oficina de Recursos Humanos para una capacitación y solicite los recursos que necesita.

- Hable con sus familiares sobre las condiciones que necesita para rendir en el trabajo.

- Si está desbordado por la carga laboral, converse con sus superiores.

- Acuda a ayuda profesional si considera que su salud mental está trastornada.