Magola Ramírez es una mujer cafetera que se destacó por su liderazgo ambiental, al impulsar la siembra de cerca de 16 mil árboles nativos en la región centro sur de Caldas desde el año 2017.
Ella es ahora conocida como la heroína de la caficultura del departamento, reconocimiento que se hizo en la feria de cafés de Colombia Expo 2022, junto a dos colombianas más y una brasileña.
Esta caficultora residente en la vereda La Batea de Villamaría, Caldas tiene la fortuna, como se llama su finca, de capacitarse y capacitar a más mujeres en la elaboración, producción y desarrollo de viveros con especies nativas de árboles, para reforestar sitios aledaños a los acueductos rurales y las microcuencas.
“Lo que buscamos al aceptar que otras personas nos enseñen cómo cuidar el medio ambiente, es que también aprendamos que no solo es sembrar un árbol sino evitar tirar basuras, realizar quemas y otros actos que como seres humanos hacemos que afectan nuestro campo y lo que en el producimos”, expresó Magola.
Esta acción preventiva de Magola la ha logrado cultivar en otras vecinas, amigas y conocidas de su vereda y el municipio, que luego de varias tardes de tertulia en los zaguanes de sus fincas, les permitió alcanzar la cifra de 16 mil especies de árboles nativos sembrados en tres veredas de la localidad, como lo son La Batea, Llanitos y la Nueva Primavera.
Llena de orgullo Magola expresa que, “el amor por el campo, echa sus raíces, y como las raíces de los palos de café se anclan en la tierra, se sostienen y ahí permanecen, así somos los que vivimos en el campo, vivimos de él pero también debemos saber cuidarlo”.
El 2022 para Magola y sus amigas de la Batea ha sido el año del crecimiento. No solo en materia de producción cafetera, sino que gracias a un evento como el de Cafés de Colombia que reunió en un solo lugar a toda la cadena de valor del café, se pudieron dar a conocer otros procesos detrás de la recolección del grano.
El evento que se desarrolló en la capital de la República se convirtió en el escenario perfecto para dar a conocer a las “Heroínas de la caficultura”, una iniciativa que buscaba destacar el gran aporte de las mujeres a la caficultura del país, a través de categorías de calidad, liderazgo y sostenibilidad ambiental.
En esta última se ubicó Magola, quien en su discurso mencionó que no solo era un reconocimiento a ella, sino a un grupo de mujeres que quieren un campo más sostenible y libre de contaminación.
“Mi objetivo siempre será el de seguir trabajando y esas cuencas que por decirle así están desprotegidas. El agua ha faltado en muchas partes del mundo, pero es por la falta de siembra de árboles, de corredores biológicos para que las especies nativas y aves migratorias lleguen a estos lugares y tengan vida de nuevo” indicó Ramírez.
Ella quien se describe como una mujer campesina de pura cepa es la primera que se levanta y la última en acostarse. Es una mujer a la que las labores del campo no le arrebatan lo que le gusta y con lo que sueña, sacar un libro con coplas y poemas en los que ilustre la vida entre montañas, paisajes y animales.
Esta “Heroína de la Caficultura” hace parte del Consejo Participativo de Mujeres Cafeteras de Villamaría, Caldas, un gremio interno que poco a poco va creciendo de la mano de la participación de las demás mujeres caficultoras en el sector, que ahora no solo se dedican a cultivar café, sino a velar por el cuidado de los terrenos donde se siembra el grano más importante de Colombia.