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Máxima sanción para soldados implicados en abuso sexual de menor embera

El caso ocurrió en el pasado mes de junio en zona rural de Risaralda.

La Procuraduría General destituyó e inhabilitó por 20 años a los siete soldados implicados en el abuso sexual de una niña emberá en Risaralda en junio de este año. A los uniformados se les aplicó la máxima sanción disciplinaria por estos hechos.

La sanción cobija a los soldados Juan Camilo Morales, Yair Stiven González, José Luis Holguín, Juan David Guaidía, Oscar Eduardo Gil, Deyson Andrés Isaza y Luis Fernando Mangaret por la retención y supuesto acceso carnal violento de la menor de 14 años.

De acuerdo con la procuradora delegada, Aura Fajardo, teniendo en cuenta que esta niña se encontraba en estado de vulnerabilidad, al ser indígena y no estar educándose, no iba a intimar con militares, por lo que es falso que ella los hubiera seducido como aseguraban los uniformados.

“Está demostrado que por su inmadurez psicológica no le era posible autodeterminar sus acciones ni comprender los riesgos a los que se enfrentaban por acercarse al lugar en donde se acantonaban los soldados”, indicó.

Fajardo también aseveró que pese a los argumentos de la defensa de los soldados sobre que no existió un abuso sexual, sino que la niña dio su consentimiento para tener relaciones con seis de los uniformados, sostuvo que “ese alegato es burdo y sin fundamento, ya que la menor no es ninguna ninfómana”.

“La atribución a la menor víctima para tener relaciones sexuales con un grupo de soldados a los cuales no conocía, además de ser una ofensa más para la dignidad de ella, no pasa de ser una idea burda y torpe”, dijo.

Congresista indígena apoyó la decisión y pide cambios en FF.MM.

Sectores políticos del Eje Cafetero vieron favorable la sanción a estos soldados en Risaralda, pero pidieron cambios al interior de las Fuerzas Militares para evitar la repetición de estos hechos.

De acuerdo con Abel David Jaramillo, el único representante a la Cámara del Eje Cafetero que pertenece a la circunscripción indígena, esta sanción de la Procuraduría debe generar cambios estructurales dentro de las Fuerzas Armadas.

"Deben tomarse determinaciones de fondo, no solo para el personal que cometió esta violación contra la menor embera, sino para que este tipo de situaciones no se repitan como ya se ha venido documentando", señaló el parlamentario.

Recordemos que estos hechos ocurrieron a finales del mes de junio de este año. La menor embera testificó que los soldados abusaron de ella cuando se devolvía para su casa, luego de salir a recoger frutas. La tía de la menor y una hermana, que la encontraron un día después de la violación, también declararon ante la justicia su versión de los hechos.

"Tenemos conocimiento de casos similares en el Vaupés, Arauca y Meta, en especial relacionados con las comunidades Nukak Makú; lo que nos da a entender que este caso en Risaralda no es una acción aislada dentro de las Fuerzas Militares", aseguró Jaramillo.

De manera extraoficial, se conoció que tres testigos del caso se negaron a declarar porque recibieron amenazas.

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