La red ferroviaria de Francia sufre un sabotaje horas antes de la inauguración de los Juegos
La compañía nacional de ferrocarriles francesa SNCF fue víctima este viernes de un "ataque masivo", que incluyó incendios provocados para "paralizar" su red de trenes de alta velocidad, afectando a 800.000 viajeros, incluyendo atletas, horas antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos de París.
La SNCF anunció el viernes por la noche "una mejoría en el tráfico" de trenes de alta velocidad de cara al fin de semana, donde muchos franceses tienen planeado empezar vacaciones, gracias a la "movilización excepcional de varios miles de trabajadores ferroviarios".
La compañía garantizará la circulación de dos de cada tres trenes hacia el oeste y el 80% en el eje norte, con retrasos de una a dos horas en estos dos ejes. En la zona este el tráfico será normal.
Entre los destrozos descubiertos la madrugada del viernes se encontraron cables cortados de fibra óptica que pasan cerca de las vías y garantizan la transmisión de información de seguridad para los conductores, así como incendios en varios puntos de la red que provocaron el caos.
Se trata de una operación de sabotaje "bien preparada", organizada por la "misma estructura", dijo una fuente cercana a la investigación.
La línea de alta velocidad Atlántico, que conecta París con las regiones de Bretaña, País del Loira y el suroeste, fue la más afectada. Ningún tren pudo circular en ninguna dirección hasta primera hora de la tarde.
Eurostar, la compañía que conecta en tren París, Londres y Ámsterdam, tuvo que cortar una cuarta parte de sus trenes el viernes.
Las personas más afectadas "son los 800.000 viajeros previstos para este fin de semana, que deben llegar a sus lugares de vacaciones" dijo el ministro delegado de Transporte, Patrice Vergriete.
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Operación "bien preparada"
Los incendios y destrozos en varios puntos de la red se hicieron con equipamiento especializado. "No se puede hacer a mano", dijo a la AFP Gerard Dué, el alcalde de Croisilles, en la región de Calais, una de las localidades afectadas, y explicó que habían arrojado líquido inflamable sobre los cables.
La fiscalía de París ha abierto una investigación y más de 50 personas están trabajando en ella, según una fuente cercana al caso.
Las muestras tomadas en los distintos lugares han sido enviadas al instituto de investigación criminal de la gendarmería nacional para su análisis urgente, agregó la misma fuente. Por el momento nadie ha reivindicado la acción.
El ataque a la red ferroviaria francesa se produjo apenas unas horas antes de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de 2024 en París, cuando muchos viajeros tenían planeado ir a la capital.
Cuatro trenes también transportaban atletas para la ceremonia de apertura pero "todos los transportes acreditados y de equipos" olímpicos se mantuvieron, informó la SNCF.
En la estación de trenes de Montparnasse, en París, una de las más afectadas, los pasillos estaban abarrotados de viajeros descontentos, algunos llorando.
Charles Fazio, de 70 años, un estadounidense de Florida, acudió a la estación en busca de información. "Es un desastre infernal, no entiendo nada. Tenemos que ir a Lille mañana para los Juegos Olímpicos", se lamentó.
Los técnicos ferroviarios seguían trabajando arduamente este viernes para reparar las instalaciones, un trabajo difícil dados los cientos de cables que hay que reemplazar y revisar.
En la línea de alta velocidad Este, un fotógrafo de la AFP vio a media docena de empleados de la SNCF, con monos naranjas, reparando cables junto a un armario metálico en la ciudad de Vandières.
