El fotorreportaje hecho en Colombia que recomienda The Guardian
Por: Laura Quiceno. Editora web
En mayo de 2017, Catalina Martin-Chico, fotoperiodista hispano francesa, regresaba a Colombia. Su primer reportaje en el país exploraba la vida de algunas quinceañeras y su relación con la cirugía estética, de esa realidad pasaría a explorar la maternidad de las excombatientes de las Farc:
"Sentía que tenía ganas de contar cosas de este país y de esta gente. Veía un país con muchas heridas que solo pedían sanarse. Los pueblos heridos siempre me conmueven, cuando se habló de paz, quise documentarla, pero no sabía cómo. En El País leí un artículo sobre las antiguas guerrilleras que quedaban embarazadas al mismo tiempo y me hizo sonreir. Pensé que la casualidad era un símbolo hermoso. Dar la vuelta a la página dando la vida, era un símbolo de esperanza y me permitía contar la historia de la transición por esa puerta de entrada. Contar la historia grande con la historia pequeña", señala Catalina con 15 años de trayectoria en el fotoperiodismo.
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Catalina y su trabajo sobre Colombia fue seleccionado por The Guardian en Inglaterra como uno de los lentes para explorar este 2019:
"Fotografié a bastantes mujeres, pero entre mi primer viaje y el segundo no me encontré con las mismas. Algunas no las he vuelto a ver porque se reencontraron con las familias y estaban en lugares sin conexión. A algunas las pude ver en los dos viajes y se volvieron mis personajes. Esas son mas o menos 6 o 7. Todas las historias son conmovedoras. Todas tienen historias, desde nuestro punto de vista, extraordinarias, pero para ellas son historias normales y así lo cuentan. Entre infancias difíciles y las pérdidas de seres queridos, las heridas o la compañía de la muerte, los abortos o abandonos de los bebes en la selva", explica.
En el artículo de The Guardian, el retrato de Olga, una excombatiente que ingresó a las Farc cuando tenía 11 años, abre la galería curada por Sarah Gilbert, editora de fotografía de esta publicación.
"Olga tiene a su compañero desde hace mucho tiempo y con la paz formaron su propia familia. Se volvió a encontrar con su hermano, que vino a vivir a la zona con su mujer y sus hijos. Lo sorprendente, el hermano trabajó durante años como militar luchando contra las Farc", relata.
En el Tolima, Valle del Cauca y Guaviare, estos retratos de Catalina reflejan las cicatrices y las historias de esperanza de las mujeres que estuvieron en la guerra.
