Presidente Petro asistió al sepelio de policías muertos en Neiva
En una ceremonia religiosa en la catedral de la Inmaculada Concepción de Neiva y a la que asistió el presidente, Gustavo Petro, la comunidad y las autoridades dieron un último adiós a los policías que murieron en un ataque el zona rural de esta capital el pasado viernes.
El Jefe de Estado llegó a Neiva al caer la tarde de este martes junto a la cúpula de la Fuerza Pública y acompañó por segunda vez en menos de una semana a las familias de los siete uniformados que fueron objeto de un ataque con explosivos y armas de fuego en un paraje rural de la capital huilense.
En la conmemoración litúrgica estaban únicamente los cuerpos de cinco de los siete policías. Las familias de dos de ellos optaron por realizar ceremonias por aparte, entre quienes está el intendente Luis Alberto Sabí, cuya familia anunció que las honras fúnebres serán este miércoles en un templo de Neiva.
El presidente Petro no intervino al término de la ceremonia y asistió, en el área exterior de la catedral, a los honores que la Fuerza Pública tributó a los uniformados.
El Primer Mandatario estuvo el pasado fin de semana en Neiva, donde presidió un consejo de seguridad, pernoctó en esta capital y partió a primera hora del sábado hacia el corregimiento de San Luis, en cuya vía de acceso ocurrió el atentado.
En San Luis escuchó a la comunidad y planteó la necesidad de atender reclamaciones históricas de esa región, rica en producción agrícola pero con un enorme abandono en temas como vías y conectividad.
El evento religioso fue presidido por monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, obispo castrense de Colombia, quien llamó a proteger ante todo la vida, como propósito central para el desarrollo de la nación.
“Para que entendamos que sobre todo la vida humana es sagrada, que no podemos destruirla, y debemos unirnos todos para procurar la reconciliación y el crecimiento de nuestro país”, subrayó el prelado católico.
