¿Cómo identificar noticias falsas y no caer en ellas?
Respire, piense y evalúe, con estas tres acciones todos podremos contribuir a combatir las noticias falsas en medio de la ‘infodemia’ desatada en tiempos de pandemia y la cual está haciendo, no solo que cientos de personas crean mentiras que circulan en las redes sociales, sino que muchas vidas se están perdiendo ante la desconfianza por las vacunas contra el Covid-19 o supuestos tratamientos milagrosos.
La Organización Mundial de la Salud denominó ‘infodemia’ a la sobreabundancia de información falsa y su rápida propagación por internet; fenómeno que ha cobrado altísima relevancia en tiempos de pandemia y que han hecho que las autoridades enciendan sus alarmas ante la masiva desinformación.
En Contacto Directo de Radio Nacional de Colombia, Mario Morales, analista y docente de la facultad de Comunicación de la Pontificia Universidad Javeriana, indicó que la desinformación está fuertemente vinculada a la emocionalidad y a las pasiones personales que hacen que su propagación sea mucho más veloz.
“La desinformación es una guerra que pasa por información engañosa, por contenido incompleto o engañoso, y esta ataca tres aspectos humanos claves: las creencias, los prejuicios y las emociones. Está claro que las audiencias buscan la información que quieren escuchar y no siempre buscan que sea clara y veraz”, indicó.
Es así como las audiencias, en esa búsqueda por encontrar una voz que respalde lo que se piensa o se cree, “se hacen más proclives a creer en ello, se montan en esa ola emocional por inverisímiles que parezcan los hechos, y después lo comparten. La emoción juega el papel de vehículo de transporte para esa difusión”.
¿Cómo saber si es contenido falso?
Alejandro Rincón, coordinador de EFE Verifica en Latinoamérica, entregó unas prácticas recomendaciones para identificar información falsa:
1. Evaluar si la información corresponde con la realidad y con los hechos.
“Las noticias falsas tienen una característica particular y es que apelan a una emoción o confirman alguna sospecha”.
2. Ir a cualquier buscador en internet y buscar contexto sobre esa situación.
“Los oyentes pueden tener la plena seguridad de que si esa información de la que dudan es real, algún medio de comunicación confiable, tradicional y con credibilidad habrá informado o registrado ese hecho, por más espectacular que parezca. Si no aparece, sospeche”.
3. Cuidado con información fuera de contexto
“La información falsa puede estar en textos, audios o imágenes. En el trabajo que hemos desarrollado evidenciamos que buena parte de la desinformación proviene de fotografías sacadas de contexto, es decir, imágenes tomadas en otra época, en otros países y en otras realidades y que se atribuyen a hechos que no corresponden”.
Todos los usuarios de internet tienen la responsabilidad de combatir la desinformación
Aunque los periodistas por naturaleza son quienes tienen la mayor responsabilidad en la verificación de datos y de fuentes, las audiencias de hoy en las redes sociales también son responsables de mitigar la desinformación.
“La audiencia también es responsable de la desinformación y aunque no hará la curaduría que debe hacer un periodista para verificar la información, si hay que pedirle que se tome el trabajo de no creerla y no compartirla. Es clave ser incrédulos con todo lo que ven en internet y no compartir de forma automática esa información. Es importante comparar esa información con medios de comunicación o periodistas de referencia”, explicó Morales.
Combatir la desinformación empieza por respirar, pensar y analizar la información que se consulta, contrastar, esperar una confirmación y, sobre todo, no compartir si no se está seguro de su veracidad.
“Somos responsables de lo que se masifica en redes sociales y sus consecuencias porque si tú lo compartes, eres responsable moralmente porque contribuyes a ese caos”, indicó.
