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Desmitificando los tatuajes: mitos y verdades sobre su durabilidad y cuidados

En Colombia se realizan 3.000 tatuajes al día, y el 19% de los adultos entre 18 y 65 años tiene al menos uno. Así mismo, se estima que el 38% de la población mundial tiene algún tipo de modificación corporal, y en países como Estados Unidos, cada año se realizan más de 11 millones de nuevos tatuajes.
Tatuajes: mitos y realidades
Crédito: Pixabay
Paula Aguirre

En los últimos años, los tatuajes han ganado gran popularidad. Se estima que el 38% de la población mundial tiene algún tipo de modificación corporal, y en países como Estados Unidos, cada año se realizan más de 11 millones de nuevos tatuajes. 

En Colombia, el fenómeno no es diferente, con aproximadamente 3.000 tatuajes realizados diariamente. Sin embargo, aún persisten muchos mitos sobre su durabilidad, proceso de cicatrización y cuidados. 

Para aclarar estos puntos, la reconocida tatuadora colombiana Ana Sofía Uriza conocida como Pícara Clavel, destacada a nivel internacional por sus piezas y diseños micro realistas, comparte información clave sobre las verdades y falsedades en torno a este arte. 

Mito 1: Los tatuajes con mucho detalle no envejecen bien

  • Realidad: La durabilidad de un tatuaje depende de la técnica del tatuador y de los cuidados posteriores. Un profesional con experiencia sabrá cómo generar los contrastes adecuados para garantizar una cicatrización correcta, permitiendo que los detalles se mantengan visibles con el tiempo.

Mito 2: Un tatuaje pequeño toma menos tiempo que uno grande

  • Realidad: Un tatuaje pequeño pero con muchos detalles puede requerir tanto tiempo como una pieza de mayor tamaño. La ejecución precisa y minuciosa de los detalles implica una mayor dedicación por parte del tatuador.

Mito 3: Los tatuajes con detalles finos se desvanecen más rápido

  • Realidad: La piel es un lienzo vivo y, con el tiempo, todos los tatuajes experimentan cambios. En el caso de los diseños detallados, se utilizan agujas finas y un proceso de capas para lograr profundidad. Factores como el metabolismo, los cuidados post-tatuaje y la calidad de la tinta influyen en su durabilidad.

Mito 4: Los tatuajes de color duran menos que los negros

  • Realidad: La aplicación de tinta de color requiere una técnica diferente a la del negro. Si se ejecuta correctamente y se siguen los cuidados adecuados, los colores pueden mantener su intensidad por mucho tiempo. Sin embargo, es natural que todos los tatuajes pierdan un poco de intensidad con los años.

Mito 5: Ciertas zonas del cuerpo afectan la calidad del tatuaje con el tiempo

  • Realidad: Es cierto que algunas áreas, como manos, pies, codos y rodillas, tienen una piel más gruesa y con mayor recambio celular, lo que puede afectar la retención de la tinta. En estas zonas, el desgaste del tatuaje puede ser mayor y
    podría requerir retoques con el tiempo.

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Es importante tener en cuenta que el tipo de piel influye en la apariencia y durabilidad del tatuaje. La exposición constante al sol puede dificultar la retención de tinta, y en tonos de piel más oscuros, ciertos diseños microrealistas pueden perder visibilidad con el tiempo.

Asimismo, la conservación del tatuaje depende en gran medida de los cuidados antes y después del procedimiento

“Además de mantener la piel hidratada y evitar la exposición al sol, es importante dormir bien la noche anterior, comer adecuadamente antes de la sesión, no sobrehidratar la piel, ya que el exceso de crema puede favorecer la proliferación de bacterias, y evitar viajar inmediatamente después de tatuarse para no exponer la piel a cambios de clima y microorganismos”, añadió la tatuadora. 

Por último, quienes se realicen un tatuaje deben considerar que no todos requieren retoques. Sin embargo, si después de la cicatrización inicial, aproximadamente un mes, se observa pérdida de detalle o intensidad, un retoque puede ser necesario. Con el tiempo, la exposición al sol también puede hacer recomendable un ajuste para mantener la calidad del diseño.


Sobre Pícara Clavel

Ana Sofía Uriza es una talentosa tatuadora colombiana, egresada de la Universidad de Los Andes con formación en diseño. Su trabajo ha sido reconocido a nivel internacional, llevándola a colaborar con algunos de los estudios de tatuaje más prestigiosos del mundo.

Especializada en microrealismo ornamental, Sofía ha perfeccionado una técnica que exige un dominio avanzado de luces, sombras y composición para lograr tatuajes de altísimo nivel de detalle en espacios reducidos.

Su estilo se inspira en el arte clásico, los grabados antiguos y los detalles barrocos, elementos que logra plasmar en la piel con una precisión excepcional. Sus piezas, que van desde máquinas de coser heredadas hasta insectos adornados con delicados motivos ornamentales, no solo embellecen el cuerpo, sino que también cuentan historias y capturan la esencia del pasado.
 

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