Leguízamo: un destino turístico por descubrir que ofrece aventura, naturaleza y cultura en el Putumayo
El trifronterizo municipio de Leguízamo, conocido como “Él Jardín exótico del Universo”. ubicado en el departamento del Putumayo, a orillas del majestuoso rio del mismo nombre, en el corazón de la amazonía colombiana, ofrece una exuberante belleza natural y una riqueza biológica incalculable.
Promotores de turismo, comerciantes, propietarios de fincas agro turísticas y líderes sociales, buscan mostrar a los turistas del mundo, la oportunidad de tener ese contacto directo con la naturaleza, avistamiento de aves, primates, delfines rosados, árboles, plantas medicinales, gastronomía ancestral y apreciar directamente los hermosos atardeceres sobre el río Putumayo.
El potencial turístico que brinda el municipio que abre frontera con Ecuador y Perú, ha motivado a sus habitantes a organizarse y trabajar unidos para ofrecer un paquete que ha gustado a los turistas del mundo.
No te lo pierdas: Guaviare fortalece estrategias de comercialización para un turismo sostenible
¿Qué ofrece Leguízamo?
La Argelia, es una finca agroturística donde se puede alimentar con la mano y sin ningún riesgo a ‘Barrabas’ un arapaima gigas o pirarucú, el pez más grande de agua dulce, que pesa más de 200 kilos y mide más de dos metros, que fue criado desde que era alevino y ahora tiene 18 años, un hijo más de Arturo Zuleta y Pastora Suarez, quienes les hacen vivir a los turistas por la magia de la amazonía.
Pepitas de la tierra, es otro emprendimiento que tiene un bohío construido en bareque, ofrece avistamiento de aves, primates y turismo étnico.
Eiño maika, liderado por abuelas (autoridades) del pueblo Murui muina, donde explican el proceso de la elaboración de la fariña y el casabe, dos platos típicos del pueblo Murui, además el turista puede conocer los beneficios de las plantas medicinales y los bailes tradicionales de este pueblo milenario.
El restaurante Arapaima, hace homenaje al pez emblemático de la amazonía, donde se puede disfrutar lo mejor de la gastronomía de la región.
La cabaña de Míster Brown, para deleitar helados de frutas amazónicas y el vino de camu camu, una fruta que tiene 40 veces más vitamina ´C´ que la naranja.
Los turistas también pueden visitar la ceiba, el árbol más grande de la amazonía, la laguna encantada y el avistamiento del delfín rosado en la bocana del rio Caucayá y lo mejor pueden llevarse un buen recuerdo representado en una hermosa artesanía elaborada a mano.
A Leguízamo se puede llegar en avión desde Bogotá, o desde Puerto Asís, hacer un viaje inolvidable, siete horas por el río Putumayo; es un territorio para conocer todo lo relacionado con el único conflicto internacional que registra la historia de Colombia, con el Perú en 1932, la historia macabra del caucho y la Casa Arana, mientras disfruta de un centenar de futas únicas de la región, escuchar mitos y leyendas de la boa (serpiente enorme) de tigre mojano, que era un taita indígena que se transformaba en tigre.
“Leguízamo, encantador, el que llega aquí se amaña”. Como dice una canción, es un territorio mágico por descubrir para los amantes del contacto directo con la naturaleza.
