Armando González y Marlon de la Peña: en recuerdo de dos grandes que partieron
El mes de marzo culminó con tristes noticias para la música en el país. Esta semana, en Radio Nacional de Colombia, rendimos honores a dos figuras que engrandecieron nuestro folclor llanero, andino y costeño, quienes lamentablemente nos dejaron en días pasados.
Armando González Buitrago (1964 – 2024)
A principios de marzo se conoció el fallecimiento en Michigan, Estados Unidos, del intérprete de cuerdas pulsadas, docente y gestor cultural bogotano Armando González Buitrago, ejecutante de cuatro llanero y cofundador, junto a Leonardo Gómez e Ignacio Ramos, de Guafa Trío, grupo pionero en la ejecución vanguardista de la música llanera y andina colombiana. González dejó el mundo luego de luchar contra un cáncer estomacal.
Muy joven, González empezó estudios en la Escuela de Formación Musical del Plan Piloto del Instituto Distrital de Cultura y Turismo de Bogotá, bajo la dirección de Samuel Bedoya Sánchez. Pronto se convirtió en profesor de la Academia Superior de Artes de Bogotá (ASAB), donde conoció a los colegas con los que integraría Guafa Trío a partir de 1998.
“Lo recuerdo como un cómplice y como un amigo para ayudar a responder las preguntas que teníamos alrededor de cómo afrontar la música tradicional colombiana desde un formato que era totalmente atípico en esos años”, nos cuenta Ignacio Ramos, flautista y socio fundador de González en Guafa Trío. Y es que el formato de cuatro, contrabajo y flauta era por ese entonces toda una rareza, tanto en la ejecución de joropos como de bambucos.
La muy positiva reacción del público en sus primeras presentaciones, incluyendo su debut en vivo en el Primer Festival de Música Llanera de Bogotá en 1998, les dieron a entender que ése era el camino a recorrer.
Sin haber cumplido un año como formación, en 1999 Guafa Trío obtuvo el Gran Premio Instrumental de la edición 25 del Festival de Música Andina Colombiana Mono Núñez. Fue, además, la primera vez que un cuatrista se presentaba a concurso. Poco después repitieron honores en el XIV Festival Hatoviejo - Cotrafa, en Bello (Antioquia). De ahí en adelante vendría el reconocimiento y decenas de giras alrededor del mundo. Mientras hizo parte de Guafa. Armando González grabó con ellos los trabajos discográficos “Música Tradicional Colombiana” (1999), “Entreverao” (2001), “Entre montaña y sabana” (2004), “A paso de León” (2005) y “Herencia” (2007).
Como compositor, dejó en el repertorio de Guafa Trío piezas como “Zumba pa’ tres”, “Pajarillo” y “El gavilán”, esta última de creación colectiva. Fue, además, director musical de la Corporación Sol y Llano en el proyecto “Pá' que se arrope y sude”, ganador de beca del Fondo Mixto de Promoción y Cultural del Meta. Hacía más de 15 años que se había ido a vivir a los Estados Unidos.
En el programa de mano de un concierto de Guafa Trío en la Biblioteca Luis Ángel Arango, anotaba el experimentado tiplista David Puerta: “El cuatro en las manos prodigiosas de Armando González es una gran orquesta en miniformato, un espectáculo en cuatro cuerdas, una cascada de Iguazú en un vaso de agua. Resulta sorprendente la variedad de sonidos, la rapidísima sucesión de acordes, los despliegues, campaneos y apagues que expresan exactamente el más hondo sentido de la obra musical: Armando no sólo toca, sino que interpreta”.
Marlon de la Peña Bolívar (1989 – 2024)
Pocas figuras tan prometedoras en la conservación de la tradición de la gaita y la flauta de millo como el músico, compositor, escritor, gestor cultural y docente Marlon de la Peña Bolívar. Tristemente, la noche del pasado 22 de marzo, mientras conducía en moto por la carretera que de Talaigua Nuevo, Bolívar, conduce a Mompox, colisionó contra un camión, perdiendo la vida en forma instantánea. Tenía apenas 34 años y se encontraba camino a participar del evento Ruta Macondo en Mompox.
Nacido en Talaigua Nuevo, la misma tierra de Totó La Momposina, Marlon de la Peña siempre soñó con hacerse músico profesional para depositar esos conocimientos en la ejecución de las sonoridades tradicionales de la Depresión Momposina. Desde muy pequeño fue alumno de los más importantes intérpretes de la gaita y la caña de millo como Pedro “Ramayá” Beltrán y Santiago Ospino, a quienes solía además hospedar y agasajar en su casa. Muy joven se trasladó a Cartagena, donde no sin esfuerzo pudo costearse estudios en Bellas Artes, graduándose en Música. Luego, realizó una especialización en Gestión Cultural.
En su afán de llevar los sonidos de su tierra a otros escenarios, logró hacerse de un acervo de gaitas y de millos en todos los tonos, lo que le permitió, entre otras cosas, participar de montajes filarmónicos con la Orquesta Sinfónica de Bolívar. Como músico, además, creó la agrupación Viento y Tambó, con la que se llevó tres Congos de Oro en los Carnavales de Barranquilla en 2022 en las categorías Folclor, Mejor Intérprete y Mejor Tema Inédito. Además, participó de la grabación del álbum “Ancestras”, de Petrona Martínez, Grammy Latino en 2021.
“Él se tomaba muy en serio el estudio, la práctica y el oficio de ser artista de músicas tradicionales, y lo hizo con el mismo rigor, profesionalismo y dedicación que amerita cualquier profesión. Y en sus tres facetas, como estudiante, músico y gestor, logró hacer muchísimas cosas en muy poco tiempo, y todas las hizo muy bien”, destaca su amigo y admirador, el musicólogo antioqueño Federico Ochoa, quien complementa: “Un día lo podía ver uno en un municipio lejano, enseñando a niñas y niños con enorme pasión, y al otro día te lo encontrabas en un teatro de lujo, tocando. Y ambos espacios le resultaban igualmente importantes”.
De la Peña, además, fue profesor en decenas de procesos de formación en municipios rurales de todo el Caribe colombiano, y creador de eventos como el Festival Anfibio de Artes y Tradiciones de Mompox y el Festival de Música Marlon de la Peña Bolívar en Cartagena. Además, encabezó varios encuentros de gestores culturales de su región e integró la Red de Gestores Culturales del Carnaval de Barranquilla, proyectos en conjunto con su compañera de vida, Rosita Lozano.
