Así fue el retorno a sus territorios de las familias embera katio provenientes de Bogotá
Después de estar más de un año asentados en la capital del país y luego de un viaje de casi 12 horas en bus hasta Pueblo Rico (Pereira), 79 familias embera Katio emprendieron a lomo de mula el recorrido final hasta los resguardos Carmen del Atrato y Bagadó en Chocó, como parte del retorno a sus territorios.
Luego de cumplir con los criterios de voluntariedad, seguridad y dignidad, la Unidad para las Víctimas y la Alcaldía de Bogotá procedieron a iniciar el retorno de las familias embera luego de concertarlo con la comunidad.
Julio Nayazá, gobernador del Resguardo Unificado en el territorio, dijo sobre la jornada: “lo más importante es lograr las condiciones necesarias para que estas familias permanezcan en los resguardos. Queremos que ellos trabajen en el campo con proyectos y que recuperen nuestras tradiciones, que no tengan que volver a la ciudad”.
De acuerdo con la información suministrada por la Coordinación de Retornos y Reubicaciones de la Unidad para las Víctimas, en total fueron 79 las familias que retornaron (207 personas). De ellas, 58 tuvieron como destino Bagadó, mientras que nueve más llegaron a Carmen de Atrato, estas pertenecientes al departamento del Choco y los 12 restantes a Pueblo Rico (Risaralda).
“Mi familia estaba muy aburrida en Bogotá, aguantando frío y hambre, por eso me tocó ir por ellos y acompañarlos. Lo que nosotros pedimos es condiciones dignas para poder vivir con tranquilidad en los territorios”, comentó José Sintúa, líder comunitario en Pueblo Rico.
Por su parte, Ramón Rodríguez, director general de la Unidad aseguró: “Les seguimos cumpliendo a estas familias que se encontraban en difíciles condiciones en Bogotá. Les entregamos por parte de la Unidad de Victimas kits de habitabilidad, ayuda humanitaria inmediata, apoyo a la sostenibilidad y auxilio de transporte hasta su destino final. Seguiremos en proceso de concertación para que todos los indígenas regresen a sus territorios ancestrales con garantías”,
El proceso está acompañado por las administraciones municipales de Bagadó, Carmen de Atrato y Pueblo Rico, las gobernaciones de Risaralda y Chocó, DPS, ICBF y SENA, todos encaminados a estabilizar esta población en el territorio para garantizar la sostenibilidad del retorno.
“Estamos comprometidos con la comunidad indígena y vamos a estar atentos desde nuestro territorio para lograr que las familias permanezcan en sus resguardos; somos garantes de sus derechos y por ello estamos trabajando en equipo con otras entidades para que ellos tengan acceso a viviendas dignas, salud y educación”, concluyó Laura Moreno, directora territorial de la Unidad.
