Cámara de Representantes evalúa el caso del congresista Alexander Quevedo
El presidente de La Cámara de Representantes, David Racero, señaló que será la mesa directiva de esta corporación, la que defina la suerte del representante conservador, Alexander Quevedo, quien fue sancionado por su partido con la pérdida de voz y voto, luego de asistir al debate de reforma laboral.
Durante la última sesión de la plenaria, el presidente de la Cámara, David Racero, señaló que el equipo jurídico de la mesa directiva de esta corporación analizará la suerte del congresista conservador, Alexánder Quevedo, quien hoy no cuenta con voz y ni voto, luego de una sanción impuesta por la veeduría del Conservador. Racero confirmó que se tomarán decisiones sobre la suerte del congresista.
“Vamos a hacer una respuesta oficial. Lo que está estipulado en nuestra carta magna, ley de leyes, está por encima de cualquier estatuto de partido; frente a derechos políticos de congresistas”, señaló David Racero.
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Esta decisión de evaluar la situación del representante a la Cámara, Alexander Quevedo, se dio luego que el congresista anunciara que no asistirá a los trámites de las iniciativas en el Congreso de la República, tras la sanción que le fue impuesta por 90 días por su partido político. El congresista lanzó críticas a la veedora del Partido Conservador, quien tomó la decisión de sancionarlo.
“La veedora del partido ha enviado un comunicado a la Mesa Directiva de la Cámara donde expresa que quedo suspendido sin voz ni voto por 90 días, en un tema que, además de ser irregular, se observa una extralimitación de funciones de manera irresponsable, pero que además es histórico porque es el primer caso en mi país donde una veedora, extralimitando sus funciones, quiere y pretende suspender un congresista de su voz y de su voto”, aseguró el representante Alexander Quevedo durante la plenaria.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes le recordó al congresista conservador que no asistir a las sesiones del legislativo puede conllevar una sanción e incluso una pérdida de investidura.
