“Su vida era una performance constante”: Franklin Aguirre sobre Juan Pablo Echeverri
El pasado 16 de junio el mundo de las artes plásticas y visuales se conmocionó tras el anuncio de la prematura muerte de Juan Pablo Echeverri, ícono, ya a sus 43 años, de las artes visuales en Colombia. Transgresor, contestatario y osado, su vida misma, su ser, apariencia y esencia fueron el objeto de su obra.
En medio de múltiples manifestaciones de pesar y los respectivos recuentos y reflexiones en torno a la obra de Echeverri, Radio Nacional de Colombia conversó, desde su magazín cultural ‘Tras bambalinas’, con Franklin Aguirre, artista visual, gestor cultural, docente universitario y curador independiente; maestro en Artes Plásticas y magíster en Museología y Gestión del Patrimonio de la Universidad Nacional de Colombia, una persona cercana al fallecido artista.
Juan Pablo Echeverri se inscribía en el 'artivismo', nombre con el cual se conoce una especie de gesto artístico y a la vez activista, como lo afirma Aguirre en nuestra conversación: “Desde muy temprano planteó un acto de resistencia… Era valiente, creativo hasta el extremo. Es sorprendente cómo, en tan corto tiempo, produjo un cuerpo de obras sumamente importante”.
La obra de un artista del calibre de Echeverri resulta ser también un reto en muchos aspectos y conceptualizar alrededor de sus propuestas es, ante su partida, algo necesario. En ese sentido, Aguirre iluminó claramente el panorama en esta conversación. “Hay dos conceptos importantes que siempre le interesaron a Juan Pablo, uno de ellos es la identidad y el otro es el cuerpo”, afirmó.
Y sobre ‘Miss Fotojapón’, la primera gran obra de Echeverri nos dijo: “La dimensión de ese trabajo es infinita, porque no sólo está presente la problemática de la fotografía como tal, como lenguaje artístico; está también la identidad, está el documento, está la fantasía, está el reflejo”.
La obra de Juan Pablo Echeverri exhibe unas líneas muy profundas de investigación que aluden a, particularmente, la mirada contemporánea de género y otras lógicas en cuanto a concepto de realidad, de virtualidad y de fantasía, que están muy vigentes hoy en el sistema del arte.
Al respecto Aguirre manifestó que “su vida era una performance constante, era todo un personaje, él habitaba ese personaje que construía, y a la vez fue un pionero en esa multiplicidad de capas o ese multiverso que es la identidad y su escenificación en lo social”.
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Y, a propósito de las redes sociales, comentó: “Habitamos lo social desde diferentes ángulos y con diferentes tonos. Entonces él, al construir todos esos personajes, a mi modo de ver, es una lectura muy personal, nos invitaba a darnos cuenta que nosotros finalmente somos no una persona sino muchas, de manera simultánea”.
“Iba para las esferas más altas del arte. Queda un legado importantísimo que podemos ver en retrospectiva y que nos permite ver cómo, alrededor de su sensibilidad, pudo mostrarnos una dimensión diferente del ser”, afirmó Franklin Aguirre quien, ya al final de esta conversación define como gran legado de Juan Pablo Echeverri “su tesón, su amor por el arte, su insistencia constante y su capacidad de relacionar la vida con el arte… El arte genera una suerte de placer visual, de placer estético, pero recordemos que la imagen es una consecuencia del pensamiento, es una consecuencia del conocimiento”.
Y nos invitó a persistir, como Echeverri lo hizo, despidiéndose con las siguientes palabras: “El arte es un bálsamo para la vida, el arte nos permite sobrevivir. Así no vayamos a ser artistas profesionales, utilicemos el arte, planteemos un espacio artístico como ese espacio de encuentro, de mediación, de reconocimiento del otro y de crecimiento. Los invito a que exploren el mundo del arte, que exploren su faceta artística”.
Escuche la entrevista completa al artista visual, gestor cultural y curador Franklin Aguirre aquí:
