Colombia es conocida por la presencia y diversidad étnica y cultural más representativas de Suramérica, pues según datos del DANE, en el país existen 115 pueblos indígenas, ubicados en 840 resguardos. Sumado a esto la población afrodescendiente: negra, afrocolombiana, raizal y palenquera, abarca el 9,34% de la población total nacional. Esto hace que la puerta de Colombia se abra para que los ojos del mundo aprecien las tradiciones, gastronomía, bailes, ritmos y costumbres de estos pueblos.
Desde el gobierno colombiano se han creado diferentes estrategias con el propósito de impulsar la protección y reconocimiento del patrimonio cultural como origen y la transmisión de saberes a las nuevas generaciones. Un ejemplo de ello es el programa ‘Juntanza Étnica’ del Ministerio de Cultura y el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes en convenio de financiación con la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional – USAID y ACDI/VOCA.
Este proyecto beneficia a cerca 2.500 miembros de las comunidades de diez departamentos: Amazonas, Bolívar, Cesar, Cauca, Chocó, Guainía, La Guajira, Nariño, Putumayo, Valle del Cauca, incluyendo a la ciudad de Bogotá, con el único fin de mejorar las oportunidades para la población, a través del apoyo a escuelas comunitarias de músicas tradicionales del Pacífico sur, la sensibilización sobre el Plan Decenal de Lenguas Nativas, procesos en los territorios que reflejan la importancia de preservar la cocina tradicional como patrimonio inmaterial y la construcción del Museo Afro de la mano del Museo Nacional, que está iniciando su segunda fase de investigación y diseño.
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El Ministerio de Cultura aseguró que “el patrimonio cultural de estas comunidades se constituye en un legado invaluable para la construcción de nuestra Nación pluriétnica y multicultural. Los aportes de las comunidades afrocolombianas e indígenas han sido determinantes en la consolidación de nuestro acervo cultural de lenguas nativas, tradiciones, músicas, danzas, literatura, cocinas tradicionales, entre otros, la conservación de la memoria, el reconocimiento y la protección de los recursos naturales, como los bosques, el agua y la seguridad alimentaria”.
El proyecto ‘Juntanza étnica’ avanza y se desarrollará a lo largo de este 2023 y tiene una visión que contempla iniciativas que continúen fortaleciendo el trabajo en red y la apropiación social y cultural de las escuelas de formación de estas comunidades.
Además de encuentros con pueblos Puinave en Puerto Inírida, Emberá en Bojayá y Quibdó, Tukano en Miraflores, Wayúu en Dibulla e Inga en el Putumayo. Así mismo, pretende incentivar las prácticas y conocimientos ligados al patrimonio agroalimentario y las cocinas tradicionales de los indígenas y afrocolombianos en lugares como Leticia y Mitú; Cartagena, Cauca y Bojayá.
Esta estrategia integral, que se desarrollará hasta septiembre de 2023, también busca promover la justicia social y la cultura como fuente de integración, inclusión y paz. A su vez, propone impulsar el diálogo intergeneracional y la transmisión de saberes a las nuevas generaciones.