Mercado de las pulgas de ‘San Alejo’: un museo a cielo abierto en Bogotá

Cada domingo, y lunes festivo, desde las 9 de la mañana y hasta las 5:30 de la tarde, en la capital del país abre sus puertas el Mercado de las Pulgas de San Alejo, ubicado en la carrera 7 No. 24-70. Un lugar que desde sus inicios en los años 80 se ha dedicado a ser un espacio para la cultura, la tradición, los conocidos ‘cachivaches’, antigüedades y un punto de encuentro para los curiosos. De hecho, desde el 2005 es reconocido como patrimonio de interés cultural por el Concejo Distrital.

“Aquí los propios, visitantes y extranjeros pueden encontrar gastronomía, anticuarios, artesanos y música. Aquí casi que usted encuentra de todo, hasta elementos de los siglos XIX y XX; ropa de segunda mano, objetos antiguos, modernos, nuevos y usados; juguetes, libros, relojes y colecciones. Este lugar de comercio es el preferido para los ‘buscadores de tesoros’ y amantes de las curiosidades”, señala Orlando Bernál, presidente de la junta directiva de la Asociación del Mercado de Pulgas San Alejo.

“Este tipo de mercados nacieron por la necesidad económica de la gente, algunas personas que tienen empleo quieren precios módicos y los que no tiene empleo, deben rebuscarse una fuente de ingresos para poder vivir, de ahí surgió la idea de poder comercializar este tipo de productos”, añadió.

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Debido a que el Mercado de las Pulgas de San Alejo es una asociación sin ánimo de lucro, no recibe subsidios del estado ni tampoco tiene un terreno propio; sus integrantes deben recurrir a arrendar las instalaciones del parqueadero aledaño al Museo de Arte Moderno de Bogotá, para que cada fin de semana los más de 300 stands comerciales que lo conforman, puedan vender sus productos a los 40 mil visitantes en promedio. Las carpas deben ser armadas en tiempo récord, cada sábado hacia las 4 de la tarde, y desarmadas los domingos o lunes festivos al caer la tarde.

Para que un comerciante o artesano llegue a ocupar uno de estos espacios en el mercado, debe iniciar como ‘temporal’, cumplir con unos requisitos, postularse y pasar por un proceso de selección; enviar las fotografías de sus productos y antecedentes judiciales, para luego de un tiempo, convertirse en miembro de la asociación y obtener su lugar.

Estos sitios comerciales, que son protagonistas en la historia de Bogotá, también tienen otros espacios en la capital del país:

El Mercado de las Pulgas de Usaquén

Ubicado en la Calle 119 con carrera 6ª, abre su comercio al público los domingos desde las 9:00 a.m. hasta las 6:00 p.m. Más que antigüedades, en este lugar, que surgió en el año 1990, se puede encontrar una amplia oferta musical en vivo, además de artesanías y objetos elaborados a mano, muestras de artistas que trabajan con cerámicas, telas, materiales reciclados como vidrios y plásticos.

El mercado de las pulgas Paseo de Rivas

Se ubica en la localidad de la Candelaria en la carrera 10 con calle 10 (a unos pasos de la Plaza de Bolívar). Abre todos los días, de lunes a sábado de 9:00 a.m. a 6:30 p.m., y los domingos de 10:00 a.m. a 3:00 p.m. Está enfocado en los objetos rurales y de carácter popular, como la maleta infantil ABC de cuero, el caballo de madera, juegos como la rana, el tejo, los trompos de madera y los yoyos antiguos. Además, es posible encontrar hamacas de San Jacinto, mochilas wuayuú y arhuacas; canastos, los carrieles paisas y muebles tradicionales en madera y mimbre.