Grafiteros y firmantes de paz llenan de color San Juan de Arama, Meta
Las paredes y la comunidad de la urbanización el Samán, son testigos de las pinceladas de paz y de reconciliación que plasman jóvenes artistas y grafiteros que llegaron desde la ciudad de Bogotá, desde Putumayo y de otras regiones del pais, y que junto a organizaciones sociales de base locales, estudiantes, Policía Nacional y firmantes del acuerdo de paz del centro poblado Georgina Ortiz, se juntaron en uno de los municipios más antiguos del departamento del Meta, San Juan de Arama, en el marco del 5° Festival Colores de Paz y Reconciliación para San Juan de Arama, donde elaboran murales a cielo abierto.
San Juan de Arama es un municipio al sur del Meta, con 487 años desde su fundación original y 58 años de creación como municipio. Esta zona del país vivió en una época pasada el conflicto armado, pero hoy aseguran sus habitantes tanto del campo, como del casco urbano, que la firma de la paz llegó para el bien. En los rostros de las y los sanjuaneros, se ve alegría, tranquilidad y afecto por el reencuentro comunitario y familiar. Los que un día empuñaron las armas, ahora se juntan con las comunidades para empuñar un pincel y pintar el futuro que desean para sus familias.
Jonatán, más conocido como “J”, es un joven artista, grafitero y muralista del municipio de Sibundoy, Putumayo, y llegó para aportar al tejido social de este municipio metense. “Parte del trabajo que estamos haciendo fue escuchar a la comunidad, y ahí formamos un vínculo para plasmar lo que ellos quieren, entonces en mi caso voy a representar a una niña, que me parece que la infancia es el principio y el fin de todo, así mismo la vinculación y respecto por la naturaleza. El propósito de pintar en comunidad es colorear lo que le guste a todo el barrio", dice.
Los artistas, comunidad y firmantes de paz, trabajan por dejar una parte de San Juan de Arama, llena de colores, donde cada mural represente el potencial paisajístico de la región, su riqueza natural, siendo la flora, fauna y las fuentes hídricas el centro de atención para su preservación.
“Uno como artista se siente muy feliz, muy grato, muy querido por la comunidad, y mirar cómo el arte, no solo sirve para sanar heridas sociales, si no también heridas emocionales y heridas dentro de la memoria histórica, entonces esto nos alienta personalmente al mirar cómo este trabajo puede involucrar el resto de las gentes en un mismo objetivo, la construcción de paz”, agrega el artista.
Por su parte, Alejandro Petión, líder de los firmantes de paz de San Juan de Arama sostiene que “aquí llegamos a este nuevo territorio a aportar con desarrollo y construcción de paz. Lo que buscamos es generar un espacio de reconciliación y diálogo social, queremos vincular a la comunidad al proceso cultural, a que se apropien de los acuerdos de paz y ha que empecemos a generar éstos diálogos, a cultivar esta confianza que ya se tiene”.
