Comunidades indígenas y negritudes proponen mejoras en su territorio
En un acto que marca un hito en la búsqueda de la paz territorial, las comunidades indígenas y negritudes de la subregión Pacífico Medio, compuesta por los municipios Guapi, Timbiquí, López de Micay y el distrito de Buenaventura, entregaron su hoja de ruta para el Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET).
Más de 150 mil personas rurales que residen en a orillas del océano Pacífico, aunaron esfuerzos para trazar el camino hacia un futuro de reconciliación. Estos municipios, que comparten historia, buscan restaurar la paz en una región marcada por décadas de violencia y abandono estatal.
En febrero de 2023, los resguardos indígenas y consejos comunitarios de la zona, acordaron reanudar la planificación a largo plazo para la implementación de los PDET, en colaboración con la Agencia de Renovación del Territorio, ART.
Fue así como este 16 de noviembre de 2023, finalmente presentaron la hoja de ruta PDET Pacífico Medio, un documento que abarca 629 iniciativas gestadas letra a letra por aquellos que viven y sufren el territorio.
El proceso se desarrolla en estricto cumplimiento con los preceptos del capítulo étnico del Acuerdo de Paz, reflejando el compromiso de los participantes con la construcción de un tejido social sólido y la promoción de la diversidad cultural.
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Al respecto, Wisne Hinestroza Valencia, representante legal del Consejo comunitario Guainía, de la zona rural de Buenaventura, dijo: “Entregamos a la ART la hoja de ruta. Es importante porque la construimos nosotros, es la primera que se construye metodológicamente y se aplica con las comunidades étnicas, porque nos permite definir cuáles son nuestras prioridades, a nivel de iniciativas”.
Asimismo, indicó: “terminamos priorizando desde los territorios qué es lo que queremos. Los pilares contienen iniciativas de salud, educación, productivas, de seguridad alimentaria, de ordenamiento territorial, sobre vivienda e infraestructura, donde estamos buscando que nuestros territorios tengan espacios de paz para nuestra gente negra e indígena”.
Durante el evento, los líderes de estas comunidades hicieron un llamado a las instituciones del Estado colombiano para trabajar de la mano y convertir en realidad las propuestas que buscan forjar una paz duradera. Esto debido a que ahora existe al plan, pero los recursos para ejecutarlos, siguen en ascuas.
La presentación de la hoja de ruta fue un testimonio del esfuerzo conjunto de personas inmersas en un territorio que ha sufrido demasiado tiempo las secuelas de la violencia y el abandono.
Así lo dio a conocer Yineth García Garcés, del consejo comunitario Renacer Negro: “Esta hoja de ruta es la esperanza para el Pacífico Medio. Sobre todo por la seguridad en el territorio, por los proyectos que van a ser ejecutados, ojalá en los próximos cuatro años, y que eso traiga bienestar para la 'Paz Total' que es lo que más buscamos”.
“Seguir viviendo como lo hacíamos antes, tener paz, vivir nuestra historia como nos dejaron nuestros ancestros, caminar nuestros caminos vecinales, caminarlos sin miedo, ir por nuestro río, que es nuestra única vía de acceso, esa es la esperanza, es lo que pedimos”, dijo Yineth para complementar.
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Finalmente, en la mesa, los integrantes destacaron amenazas a su cultura, como la falta de caracterización sobre el número de parteras y sabedores locales, restricciones al acceso a lugares sagrados debido a la situación de orden público, deforestación, incidencia del cambio climático y pérdida de prácticas tradicionales.
Estas comunidades, cuya subsistencia se basa en la agricultura, la pesca artesanal, la minería y la elaboración de artesanías, han delineado puntos clave para el bienestar de sus ciudadanos y lo dejan plasmado en una cartilla que ahora está en manos del Gobierno Nacional.
