Al menos 1.300 niños migrantes han sido atendidos por el ICBF en Necoclí, Antioquia
Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), desde que comenzó la crisis migratoria de ciudadanos haitianos, 17 mil menores de edad han cruzado el Tapón del Darién, en límites entre Colombia y Panamá, algunos de ellos con cuadros de desnutrición crónica.
De esta cantidad, el Instituto Colombiano del Bienestar Familiar (ICBF) ha logrado atender, a través de sus equipos móviles de protección a la primera infancia (psicólogos, nutricionistas, trabajadores sociales y pedagogos), a 1.300 niños que no pueden ser cobijados con un proceso de restablecimiento de derechos en razón a que ni ellos ni sus familias permanecen en el municipio de Necoclí, en Antioquia, sino que continúan su tránsito hacia Norteamérica.
“Hay una tragedia grande. Hay muchos niños de cero a cinco años que no están en condiciones adecuadas. Tratamos de verificar el estado en el que están, que vayan con alguien de su entorno familiar y que salgan con chalecos cuando se montan a las lanchas”, dijo Selma Roldán, directora de la Regional Antioquia del ICBF.
Aunque las autoridades han encontrado niños que no están bajo el amparo de un familiar cercano, lo cierto es que, hasta la fecha, en el municipio de Necoclí no hay denuncias formales de menores que, en su trayecto migratorio, hayan perdido a sus familias, quedando en un inminente estado de desprotección.
“Estamos mirando qué niños y adolescentes están saliendo en las lanchas. Hemos atendido a 1.300 menores que son los que tienen mayor desprotección. Sin embargo, los haitianos tienden a proteger mucho a sus niños. Lo que hemos hecho es un acompañamiento familiar, advirtiéndoles que van a entrar a la selva y alimentando a los menores con bienestarina líquida”, agregó Roldán.
Las cifras del ICBF evidencian que por el puerto de Necoclí han pasado al menos 62 mil haitianos. Por ello, esta entidad del Estado ha concentrado sus esfuerzos en mitigar las condiciones de desnutrición de los niños antes de que partan con sus acompañantes hacia el municipio de Acandí, en el norte del departamento del Chocó.
