Los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) son una llamada a la acción para intentar erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la paz y prosperidad mundial para 2030. Estos objetivos, adoptados en 2015 por todos los Estados miembros de la ONU, abarcan una gama de aspectos sociales, económicos y ambientales.
Aunque no se menciona explícitamente en los ODS, la educación financiera juega un papel crucial en la consecución de varios de estos objetivos, especialmente aquellos relacionados con la erradicación de la pobreza, el trabajo decente, el crecimiento económico y la reducción de las desigualdades.
Objetivo 1: poner fin a la pobreza
El primero de los objetivos se refiere a la reducción de la pobreza en todas sus formas en todo el mundo. Las investigadoras Adele Atkinson y Flore-Anne Messy argumentan al respecto: “La educación financiera es un determinante clave para el desarrollo económico sostenible, al permitir a las personas tomar decisiones financieras informadas”.
Objetivo 4: garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad
Integrar la educación financiera en los sistemas educativos promueve una educación de calidad y prepara a los jóvenes para que puedan afrontar de manera informada la toma de decisiones financieras. La UNESCO afirma que “la educación financiera en las escuelas es esencial para equipar a los jóvenes con las competencias necesarias para tomar decisiones financieras prudentes a lo largo de su vida”.
Asimismo, otros estudios destacan la importancia de la educación financiera en la promoción de comportamientos financieros saludables a largo plazo, estableciendo una correlación positiva entre la educación financiera y las decisiones financieras informadas y sostenibles.
Objetivo 5: lograr la igualdad entre los géneros
La alfabetización financiera juega un papel crítico en el empoderamiento de las mujeres y la igualdad de género. Según un informe del Banco Mundial, “las intervenciones en alfabetización financiera dirigidas a mujeres pueden tener impactos significativos en su autonomía económica y contribuir a cerrar las brechas de género en acceso a recursos financieros”.
Objetivo 8: promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible
La educación financiera también contribuye al crecimiento económico, al empleo y trabajo decente para todos al fomentar el emprendimiento y la innovación financiera. La alfabetización financiera mejora la capacidad de los individuos para iniciar y gestionar negocios, lo que a su vez promueve el crecimiento económico y la creación de empleo.
Objetivo 10: reducir la desigualdad
En relación a la reducción de las desigualdades, hay estudios que sugieren que programas de educación financiera bien diseñados pueden tener un impacto significativo, contribuyendo a la equidad económica.
Objetivo 12: garantizar el consumo y la producción sostenibles
La educación financiera también juega un papel crucial en la promoción del ODS 12: a través de una mejor comprensión de los conceptos económicos, las personas pueden tomar mejores decisiones.
Algunos estudios que analizan la correlación entre la educación financiera y los comportamientos financieros a largo plazo sugieren que una educación financiera de calidad lleva a la toma de decisiones más sostenibles.
Objetivo 13: combatir el cambio climático y sus efectos
Con respecto al ODS 13 de acción por el clima, la inversión sostenible, impulsada por una mayor alfabetización financiera, es crucial para la acción climática.
Objetivo 17: revitalizar la alianza mundial para el desarrollo sostenible
Este objetivo subraya la importancia de trabajar en colaboración para mejorar la estabilidad macroeconómica global, movilizar recursos financieros para los países en desarrollo y fomentar un sistema de comercio mundial inclusivo y equitativo.
Estas metas se alinean estrechamente con los objetivos de mejorar la educación financiera a nivel global, ya que una mayor inclusión financiera puede contribuir significativamente a la estabilidad económica y al desarrollo sostenible.
Impulsar la educación financiera para alcanzar los ODS
La sinergia entre la educación financiera y los ODS es clave para conseguir la sostenibilidad global. Conseguir esta sinergia aumenta la necesidad de promover prácticas de consumo responsable, movilizar el capital hacia inversiones sostenibles y lograr una mayor inclusión, con el objetivo de crear una sociedad más equitativa y sostenible.
Integrar este tipo de educación en las estrategias nacionales e internacionales ayudará a los países a lograr la consecución de los ODS.
De ahí la importancia de desarrollar iniciativas que impulsen la educación financiera desde etapas tempranas, como la que desde hace varios años desarrolla la Universidade da Coruña, involucrando a estudiantes de la Facultad de Economía y Empresa en la impartición de talleres formativos.
Xhania Aneiros Taboada, graduada en ADE y Derecho y poseedora de una beca de colaboración en el departamento de Empresa de la Universidade da Coruña, es coautora de este artículo.
Joaquín Enríquez Díaz, Profesor del departamento de Empresa, Universidade da Coruña y Begoña Alvarez García, Profesora del Departamento de Empresa de la Universidade da Coruña, Universidade da Coruña
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.