La Fiscalía General le imputó el delito de cohecho a Esteban Ramos Maya, hijo del exgobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, por supuestamente dar u ofrecer dádivas al fiscal tercero delegado del Grupo de Falsos Testigos, José Ignacio Umbarila.
De acuerdo con el ente investigador, Ramos Maya compró un tiquete aéreo que cubría la ruta Pereira – Medellín para que el fiscal asistiera a la audiencia de verificación del preacuerdo de Juan Carlos Araiza, quien declararía a favor del exgobernador de Antioquia investigado por parapolítica.
“Voluntariamente y con conocimiento de causa, usted Esteban Ramos Maya, con el propósito de evitar la frustración de esa diligencia judicial que podría culminar con la declaratoria de responsabilidad por falso testimonio de un testigo de cargo en contra de su padre, por cuenta de la eventual inasistencia del fiscal que se hallaba varado en la ciudad de Pereira, decidió patrocinar privadamente el desplazamiento de José Ignacio Umbarila Rodríguez”, explicó el delegado.
Añadió que “para ello usted se sirvió de la colaboración consciente y voluntariamente prestada por su esposa, Alejandra González, quien facilitó su cuenta de ahorros de la entidad Bancolombia para realizar la citada transacción a través del portal web de la extinta empresa Aerolíneas de Antioquia y la pasarela de pagos PSE por valor de $134.128. Finalmente, tanto usted como su esposa comunicaron al abogado Pinilla Gómez los resultados favorables de la compra realizada e hicieron llegar el comprobante y voucher resultante de la misma, aquel profesional del derecho con el ánimo inequívoco de que la remitiera a su vez al fiscal Umbarila para su utilización gratuita, como en efecto ocurrió”.
La Fiscalía, además, tiene en su poder una conversación entre Ramos Maya y el abogado Leonardo Pinilla sobre la compra del tiquete aéreo para el fiscal Umbarila.
“Usted Esteban Ramos Maya, persona interesada en el proceso penal que el fiscal José Ignacio Umbarila Rodríguez adelantaba como acusador y en el que su progenitor Luis Alfredo Ramos Botero, ostentaba la calidad de víctima, se sirvió de la colaboración voluntariamente prestada por su cónyuge Alejandra González, para adquirir un tiquete aéreo que es una utilidad apreciable en dinero en favor de aquel servidor público (...) el fiscal Umbarila, recibió e hizo uso de tal pasaje de manera gratuita, evitando hacer erogación alguna económica y en virtud de desplazamiento desarrollado y que usted subvencionó”, indicó el delegado.
Sin embargo, tras escuchar al fiscal, Ramos Maya se declaró inocente. “No, mi señoría, siempre he actuado de buena fe, no he cometido irregularidades, soy inocente, su señoría", afirmó y no aceptó cargos. Cabe recordar que el delito de cohecho tiene una pena entre 48 a 108 meses de prisión y una sanción económica entre los 66.66 a 150 salarios mínimos mensuales legales vigentes.