En medio del juicio disciplinario que adelanta la Procuraduría General contra los soldados Juan Camilo Morales, Yair González, José Holguín, Juan David Guaidía, Óscar Gil, Andrés Isaza y Fernando Mangareth, implicados en la retención y acceso carnal de una menor de edad indígena en Risaralda, se conoció que estos militares, habrían invitado a sus compañeros a participar en estos delitos.
"Algunos de los partícipes en los hechos llamaron a otros soldados a que fueran a acceder a la niña indígena víctima en este caso", aseguró el procurador delegado.
Además, uno de los testigos en este juicio, el soldado Santiago Bedoya, reconoció que mintió en su versión ante la Fiscalía General por este proceso.
"Le preguntó ¿usted cuándo dio declaración allá dijo toda la verdad? No señor, no dije toda la verdad (...) Estaba al mando mi sargento viceprimero Díaz, mi primero nos dijo qué decir", reveló.
De acuerdo con el uniformado Bedoya, su superior les indicó que debían decir que todos los días se movían de sitio y no permanecían todo el tiempo en el mismo lugar, situación que no era cierta, y que se habían instalado a la salida del colegio del corregimiento Santa Cecilia, cuando estaban dentro de la institución, pese a tenerlo prohibido.
Dicha versión fue respaldada por el soldado Iván Andrés Herrera, que sin embargo, señaló que él no obedeció y dijo toda la verdad al ente investigador y por el soldado Juan Sebastián Imbachí, quien afirmó que antes de las declaraciones, sus superiores les dijeron que sobre ciertas cosas no podían hablar.
Los testigos además aseguraron que el día antes de la retención y abuso sexual sí vieron a la menor de edad, pero que el día de los hechos no, así como que tampoco escucharon gritos o algo anormal en la noche.