Comisarías de Familia no deben obligar a víctimas a encontrarse con sus agresores

La Corte Constitucional advirtió a las Comisarías de Familia que no pueden obligar a las mujeres a confrontarse con sus exparejas en procesos por violencia intrafamiliar, pues estarían incurriendo en actos de violencia institucional e incluso ocasionando daños a las víctimas. 

El alto tribunal reiteró y reafirmó que las mujeres son titulares de deberes y garantías en los procesos de violencia intrafamiliar, por lo que se les debe garantizar el no ser confrontadas personalmente con su agresor y decidir si desean o no asistir a las audiencias contra sus exparejas. 

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Sin embargo, la Corte precisó que el hecho de que las mujeres asistan o no a una audiencia, no quiere decir que las Comisarías no las informen sobre cómo avanza el proceso para conocer los detalles de las decisiones que se pueden tomar. 

“Las autoridades de familia deben informar a las mujeres que tienen este derecho, el cual se traduce en el privilegio de participar o no, en cualquier procedimiento o diligencia administrativa, civil o penal, o solicitar medidas alternativas o de acompañamiento que garanticen su participación en condiciones de seguridad”, recordó el alto tribunal. 

El pronunciamiento lo hizo la Corte al conocer el caso de una mujer que, pese a ser víctima de actos de violencia física y sexual por parte de su expareja, una Comisaría de Familia la obligó a confrontarse presencialmente con su agresor, sin ofrecerles las garantías necesarias para este tipo de situaciones y causándole un daño emocional al enfrentarla en las diligencias con la persona que la lastimó.