De acuerdo a un estudio publicado por la revista Recovery, en 2023, se estimó que se produjeron 743 mil millones de botellas y envases de vidrio en todo el mundo y se proyecta que en 2029, la producción de estos envases alcance los 1,03 billones de unidades.
Así mismo, la investigación arrojó que en todo el mundo se producen alrededor de 130 millones de toneladas de vidrio al año, de los cuales solo el 21% se recicla.
En la actualidad, Europa es el líder en materia de reciclaje y tiene mayor participación en el mercado de vidrio reciclado.
En promedio, se estima que el 76% de los envases y contenedores de vidrio que produjeron fueron reciclados. Esto se debe a que países como Suecia, Bélgica y Eslovenia, cuentan con sistemas eficientes de separación de desechos.
Además de que en todo el continente hay una alta demanda de vidrio reciclado en las industrias de bebidas y alimentos, la farmacéutica y de construcción.
¿Y Catatumbo, cómo aporta al reciclaje?
En Colombia, el vidrio es uno de los materiales que más se aprovecha, con un 13% de los residuos reciclados. En el país, se reciclan anualmente 120.000 toneladas de vidrio, lo que equivale a 500 millones de envases.
Para muchos esta práctica se ha limitado a solo entregar de vuelta las botellas a los establecimientos comerciales o a recolectores informales.
Sin embargo, en el municipio de Ocaña, en el departamento de Norte de Santander, Nixon Carreño, un joven emprendedor buscando ideas para comenzar un proyecto universitario, encontró un video en las redes sociales donde observa que en la India transforman botellas de vidrio en vasos para uso doméstico.
Es así que, desde la sala de su casa comenzó a construir un pequeño cortador de botellas artesanal que utiliza el calor para dividir el vidrio, luego de cortar sus dos primeras botellas, Nixon suavizó los bordes de estas con lija fina para evitar que quien los utilice pueda cortarse.
Así nació Clean World Nian, que es “una empresa dedicada al reciclaje en mediana escala para la transformación de botellas de vidrio en vasos y jarrones” afirma Carreño.
¿Cómo inició el proyecto?
A partir del éxito de la idea surgida desde su hogar, Nixon decidió apoyarse en el grupo de creativos y docentes del Tecnoparque del SENA en Ocaña, lugar que busca impulsar los emprendimientos e ideas de los habitantes de la región.
Es ahí donde estos ayudan a crear una cortadora de vidrio que facilita el trabajo de división del vidrio, así mismo, se brindó orientación para formalizar el emprendimiento registrándose en la cámara de comercio de Ocaña para que este pueda acceder a charlas, capacitaciones y ferias de emprendimientos.
“En uno de estos eventos conocimos a un empresario gastronómico que se interesa en mi trabajo tanto así que sin pensarlo tanto decidió realizar el primer pedido de vasos de vidrio para un restaurante en Ocaña”, comentó Nixon Carreño.
Tras meses de trabajo y mientras se ocupaba en uno de sus pedidos, a Carreño se le ocurre una idea, mostrar su proyecto y lo que quiere alcanzar desde su casa en las redes sociales.
“Quería compartir mi idea, quizás inspirar a muchas personas, pero también expandir esta idea y llegar a más empresas que se pudieran interesar en mis productos”, afirmó Carreño.
Luego de subir videos, mostrando el proceso de corte, fabricación y personalización de sus botellas transformadas en vasos, comenzaron a llegar solicitudes de pedidos de clientes que se interesaban por el cuidado del ambiente.
¿Qué hace diferente la idea de Nixon Carreño?
Luego de llegar a un mercado fuera de la región, gracias a las redes sociales, la demanda de vasos aumentó, como afirma Nixon Carreño.
“Se pasó de vender algunas pocas unidades a pequeños comerciantes que decidían apoyar mi idea en Ocaña, a venderle vasos a restaurantes de cadena y almacenes en otros departamentos”, comentó.
Luego, el joven emprendedor decidió buscar aliados estratégicos, y los encontró, los recicladores informales que recorren las calles de Ocaña, a quienes Carreño paga 500 pesos por botella, generando con esto una simbiosis entre aquellos que buscan ganarse la vida a partir del reciclaje y quienes ven en la basura una idea de negocio.
Actualmente desde Clean World Nian, la empresa de fabricación de vasos de vidrio a partir de botellas recicladas de Nixon Carreño, la cual se encuentra en Ocaña, Norte de Santander, brinda oportunidad de empleo a cuatro personas directamente y a más de veinte de manera indirecta contribuyendo al desarrollo de la región.
“Poco a poco estamos haciendo nuestro trabajo y queremos dejar una huella, quizás llegar a impactar a más emprendedores en otros países y por qué no, al mundo entero; quiero que mi idea se replique en otros lugares a más gente comprometida con el medio ambiente”, afirmó Nixon Carreño
La historia Nixon Carreño es la de un joven que soñó con una idea de transformación del territorio a partir del reciclaje, y que siente orgullo al mostrar que en el Catatumbo también se tiene conciencia ambiental y que se trabaja por cuidar la vida y la naturaleza, y que se está cambiando al mundo, o bueno ya se empezó por el Catatumbo.