Según el Alto Comisionado de la ONU, Volker Türk, la mayoría de los muertos son mujeres y niños. Según las más recientes cifra del Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, gobernada por el movimiento islamista palestino radical Hamás, 38.600 personas han perdido la vida en la Franja y 89.000 han resultado heridas.
Además, los datos más actualizados del Ministerio de Sanidad gazatí, indican que todavía quedan unos 10.000 desaparecidos en Gaza, mientras que el 72 % de las víctimas mortales del conflicto son mujeres y niños.
Un panorama crudo para los niños
Según AFP, la guerra en Gaza obligó a los niños palestinos a trabajar para atender las necesidades de sus familias en el territorio palestino donde ahora, según el Banco Mundial, "casi todo el mundo" es pobre.
En Gaza, uno de los territorios más poblados del mundo pero también uno de los más pobres, la población es joven. Uno de cada dos habitantes es un niño.
Bajo bloqueo israelí desde hace 17 años, sin perspectivas económicas o de desarrollo, el trabajo infantil, al contrario que en el resto del mundo, no dejó de crecer en los últimos años.
La ley palestina prohíbe oficialmente trabajar antes de los 15 años, pero el empleo de niños en la agricultura o la construcción ya existía antes de la guerra.
Actualmente, con cientos de miles de empleos perdidos, más del 60% de los edificios destruidos o dañados y la ausencia de electricidad, trabajar es un reto.
Para sobrevivir, los adultos que intentan encontrar una plaza en los campos improvisados, continuamente en movimiento con las órdenes de evacuación del ejército israelí, llevan a los niños con ellos.