Cancillería respondió a moción en Perú que declaró “persona no grata” a presidente Petro
Luego de que el Congreso de Perú declarara al presidente de Colombia, Gustavo Petro, como “persona no grata” ante las declaraciones del mandatario sobre el actuar de la fuerza pública de ese país en medio de las manifestaciones contra al presidenta Dina Boluarte, la Cancillería se pronunció frente al hecho.
“El Ministerio de Relaciones Exteriores toma nota de la moción del Congreso de la República del Perú, relacionada con el presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro Urrego. Interpreta que este es un acto de carácter político del órgano legislativo del Perú, que no compromete al pueblo y, por lo tanto, no afecta la histórica relación con la hermana nación”, se lee en el comunicado.
"Marchan como nazis contra su propio pueblo, rompiendo la Convención Americana de Derechos Humanos", dijo Petro en su momento, declaraciones que causaron rechazo en el ejecutivo del país vecino en cabeza de Boluarte que este sábado le recomendó a Petro “dedicarse a gobernar Colombia”.
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En el comunicado, la Cancillería expresó que confía en que estos actos políticos no afecten los intereses comunes de los dos países y sus relaciones históricas.
“Confía en que, en el marco de las históricas relaciones de hermandad y buena vecindad entre Colombia y Perú, se continuará el trabajo conjunto para promover los intereses comunes como son, entre otros, el fortalecimiento de la integración regional, la protección de la Amazonía y su biodiversidad, la transición energética, la mitigación de los efectos del cambio climático, la superación del fenómeno de las drogas ilícitas, el fenómeno migratorio y el bienestar de las comunidades, especialmente de las asentadas en la zona de frontera”.
Finalmente, el Ministerio de Relaciones Exteriores dejó de presente su rechazo a “los recientes hechos de violencia ocurridos en el Perú, que han afectado la integridad de sus ciudadanos”.
Este domingo el gobierno de Perú negó que se hayan presentado violaciones a los derechos humanos y hechos de racismo durante las protestas, que ya dejan 48 civiles muertos.
