Óscar Hernández: cinco años sin el poeta que revolucionó el bambuco

En su juventud, el medellinense Óscar Hernández Monsalve se debatió entre ser actor, boxeador y futbolista. Luego se integró a un grupo de colegas que incluía a Manuel Mejía Vallejo, León de Greiff y Alberto Aguirre, y allí fue donde encontró su vocación y se convirtió en un respetado editor y columnista de prensa.

Nacido en Medellín el 3 de noviembre de 1925 y fallecido en la misma ciudad el 4 de septiembre de 2017, Hernández es recordado, entre otras, por su columna de opinión ‘Papel sobrante’, publicada ininterrumpidamente en el periódico El Colombiano por más de 50 años, así como por sus publicaciones en la editorial independiente del mismo nombre, llamada así porque los libros que lanzó se hacían con papel que finalmente no se utilizaba en la impresión del periódico.

Pero más allá de eso, la música andina colombiana le debe a Óscar Hernández un cambio de paradigma hacia la modernidad, gracias a las letras de sus bambucos, pasillos, danzas y valses escritos al lado del guitarrista León Cardona (n. 1927), de Yolombó, Antioquia. Las ideas que esgrimió Hernández acerca de la música andina colombiana, plasmadas en un puñado de poemas musicalizados, le dieron un giro absoluto a la estética literaria de los géneros del interior.

Todo empezó en 1968, cuando Hernán Restrepo Duque, productor artístico del sello Sonolux, le pidió al guitarrista y compositor León Cardona que musicalizara tres de los poemas de Hernández. “En ese entonces yo no lo conocía”, explica Cardona. “Él sostenía que las letras de todos los bambucos eran hechas con las mismas 40 o 50 palabras: el bohío, las trenzas, el carriel, la ruana, el machete, y así. Y él sentía que tenía más cosas por contar como letrista”.

Los tres primeros bambucos de Óscar Hernández, con música de León Cardona, fueron ‘El premio’, ‘La mejora’ y ‘No abandones tu tierra’, y fueron estrenados en el trabajo discográfico ‘La internacional’ (Sonolux, 1968), de Leonor González Mina. “A la Negra Grande de Colombia la habían invitado a una gira internacional por la Unión Soviética, así que Hernán, para conseguirle una platica, decidió lanzarle ese disco. Como sólo tuve una semana para componer los temas y el álbum debía salir pronto a la venta, las canciones fueron grabadas sólo con mi guitarra”.

Las ideas vanguardistas del músico y el letrista hicieron de su obra un dechado de creatividad que abandonaba las armonías y las temáticas tradicionales en busca de la modernidad. Tras esa primera experiencia, en 1985 volvieron a juntarse para componer, y hasta 1992 siguieron realizando piezas. Fueron pocas, 14 en total, aunque suficientes para que Hernández Monsalve llegara a ocupar un honroso lugar dentro de los letristas de música andina colombiana.

Esos restantes temas fueron ‘Hoy vamos a vivirnos’ (bambuco), de 1985; ‘Azul, azul’ (vals), ‘Migas de silencio’ (pasillo), ‘La canción del amor’ (danza), ‘Si no fuera por ti’ (pasillo) y ‘Dame tu mano, recibe mi tristeza’ (bambuco) de 1988; ‘Hay un solo camino’ (bambuco) de 1989; ‘Cuando el camino se acaba’ (bambuco canción) y ‘Nos quedan debiendo el cielo’ (bambuco) de 1990; ‘Magos y poetas’ (danza) y ‘Sólo el amor’ (danza), de 1992.

Ese conjunto de piezas, breve pero poderoso, es parte integral del repertorio andino colombiano desde entonces, y ha sido llevado al disco por solistas y agrupaciones como el Dueto Sombra y Luz, Folkloreta, el Dueto Primavera, el trío Ancestro, el Dueto Las Mellis (apadrinado por el propio León Cardona para difundir estas canciones), el Trío Nueva Gente y Luz Marina Posada, cantante antioqueña que en 2017 grabó un trabajo íntegramente dedicado a la obra de Cardona y Hernández bajo el nombre de ‘Magos y poetas’.

Hasta su muerte, a sus 91 años, Óscar Hernández Monsalve jamás enfundó la pluma. Según se lo dijo de manera lacónica a Mateo García para el diario El Tiempo, seguía escribiendo porque “es lo mismo que seguir viviendo. Esa es mi manera de vivir, y lo seguiré haciendo”.

El 4 de septiembre conmemoramos cinco años de la partida de Óscar Hernández Monsalve, el poeta que revolucionó la música andina colombiana. Por eso es nuestro Artista de la Semana.