Son Callejero: salsa para la transformación social

La orquesta Son Callejero, conformada por glorias de la salsa colombiana que por cuenta de la adición y el olvido cayeron en la marginalidad de la calle, vuelve a ser noticia, es año la agrupación hace parte del cartel de apertura del Festival Salsa al Parque, que tendrá lugar este viernes 3 de junio en el Bronx Distrito Creativo. 

Su historia se remonta al 2009, cuando Dairo Cabrera decidió crear la primera orquesta salsera de inclusión social en Colombia, con la que pretendía darle una nueva oportunidad a músicos destacados del país que, por efectos de las drogas, habían terminado en las calles.

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“Al inicio no contábamos con que nos íbamos a encontrar grandes salseros que habían perdido sus carreras por culpa del consumo y que ahora estaban viviendo en las calles de la ciudad”, comenta Dairo. Sin embargo, gracias a la subdirección de adultez y su iniciativa ‘acciones culturales en calle’, lograron reactivar a todos estos artistas en este nuevo grupo que los reintegraría a la sociedad.

¿Por qué Son Callejero?

Este nombre surgió del mismo Dairo Cabrera, “me inspiré en el son cubano, como un homenaje a ese ritmo y lo combine con la palabra callejero por la forma de vida que llevaban estos grandes artistas”, cuenta. 

¿Quiénes conforman este grupo?

Sus integrantes son interpretes que tienen una gran pasión por este género y algunos, incluso, cuentan con un amplio bagaje en el mundo del espectáculo. Varios tocaron alguna vez junto a figuras como Richie Ray, Olga Guillot, Niche, Henry Fiol, Guayacán y El Nene y sus traviesos, por mencionar algunas.

“Muchos de ellos son empíricos, pero la estructura principal está compuesta por cuatro músicos experimentados, talentosos y capaces, que se ganaban la vida como grandes intérpretes de diferentes agrupaciones. Por ejemplo, Roberto Echeverría fue director musical e incluso tuvo su propia orquesta llamada ‘Bambú’, esta fue la primera agrupación que ganó el Festival Salsa al Parque, en ese entonces era muy diferente”, comenta Dairo. 

Además de tener su propia orquesta, Roberto fue un arreglista reconocido y consolidado en las grandes disqueras del país, llegando a colaborar con Joseito Martínez, Latin Brothers e incursionó como bajista y guitarrista en las bandas que acompañaban a Richie Ray, Olga Guillot, el Judio Maravilloso, entre otros, en Colombia.

Edgar Espinosa es otras de las bases de Son Callejero, “fue cofundador del Grupo Niche, director musical de Henry Fiol, acompañante internacional de diferentes bandas como la de Paquito Guzman, Oscar D’León, entre otras”, asegura Dairo. 

“Antonio Ortiz o Toño Ortiz, es el timbalero que perteneció a la orquesta Guayacán, Washington y sus latinos y al grupo Niche antes de que se conformará formalmente. Es un percusionista chocoano muy talentoso que fue parte de muchas orquestas nacionales e internacionales”, cuenta Dairo.

El cantante principal de este grupo es Alberto Puello Villareal, “El Halcón”, fue vocalista de orquestas como la de Hernán y sus traviesos, Los Titanes, Adolfo Eceheverría, Rubén Darío Salcedo (donde compartió un toque con el Joe Arroyo en el Colegio Antonia Santos) y César Pompeyo y la Sonora del Caribe, con la que ganó el Congo de Oro. Además, acompañó en los 90s a Richie Ray de gira cristiana por el país.

“Queremos vencer la marginalidad”

El objetivo de Son Callejero, según Dairo es “vencer la marginalidad”, ya que asegura que “después de tantos años la música se ha vuelto la herramienta principal para la redención, la manifestación y la expresión del talento natural que ellos tienen y que no perdieron a pesar de la vida que llevaban”. Además, también desean ofrecer los testimonios de sus integrantes a través de la musicalidad para que la historia de ellos no se repita.

“Cuando esto empezó, todos eran habitantes de calle con diferentes dificultades como los vicios, sin embargo, en este momento, la mayoría ya no se encuentran viviendo en la intemperie y han logrado salir de la marginalidad que crea esta forma de vida”, Dairo asegura que, para ellos, este es el logro más grande alcanzado por Son Callejero, ya que “logramos reconectarlos con la música y sus familias”. 

“Lo más grato es que la comunidad los admira, los reconoce y los ve como un ejemplo a seguir”, Dairo reconoce que el camino no fue fácil, pero ver los resultados que han conseguido los integrantes, hace que todo valga la pena. 

Talento para expresar

Son Callejero tiene un amplio repertorio de canciones inéditas, ya que, según su fundador, “lo que tienen ellos es talento para componer y expresar”. Algunas de sus canciones oficiales son ‘Soy Callejero’, ‘Mis manos tan kanza’ (tema escrito por Edgar Espinosa mientras habitaba en las calles de Bogotá), ‘Veneno Infernal’ y, la más reciente, ‘Pa ti salsero’

A pesar de su amplio reconocimiento en la ciudad, Dairo admite que “todo lo que es causa social en Colombia es complicado de sostener. A nosotros no nos han dado la oportunidad de tocar en grandes escenarios, tampoco nos reconocen en muchos eventos y hemos tenido que recurrir a ayudas económicas de franceses que han visto en nuestra causa un gran potencial”. Para recaudar fondos también acuden a convocatorias culturales y artísticas que se ofrecen en algunas ocasiones, sin embargo, no es suficiente para brindarles a los integrantes de esta agrupación, todo el sostenimiento que necesitan.

Fundación cultural Son Callejero

Además de ser una agrupación salsera, Son Callejero es una fundación cultural que tiene como objetivo ayudar a quienes han sufrido diferentes problemáticas sociales. En este momento se encuentran en la búsqueda de convocatorias que les permitan hacer talleres de formación para niños del centro de Bogotá que necesitan de la música como un refugio. “Estamos esperando también el apadrinamiento de personas externas, si lo logramos, podremos ayudar entre 100 y 150 niños a través de clases y talleres que también dictan los integrantes de nuestra orquesta”, afirma Dairo.

“Son Callejero aún tiene mucho más que dar”

En el futuro, Dairo espera que los integrantes puedan viajar y compartir su talento con todo el mundo, pero sobre todo, los ve como un proyecto de educación y formación que ayudará a los futuros salseros de Colombia.

“En un futuro los vemos como formadores de una escuela artística callejera, donde puedan transmitir sus conocimientos a los niños que atraviesan situaciones difíciles como las que ellos atravesaron y de esta manera lograr que la música también sea su lugar seguro”.

Son Callejero comparte sus canciones, vivencias y Master Class a través de su canal de YouTube, sin embargo, podrás escucharlos en vivo este viernes 3 de junio a las 7 p.m. en el Bronx Distrito Creativo, en la Carrera 15 con Calle 10.