Una nueva edición del Giro de Italia llega a su fin en Roma y ahí ondeará la bandera colombiana con el segundo lugar de Daniel Felipe Martínez. A sus 28 años, Martínez vive una temporada de lujo en las carreteras más importantes del mundo.
En su natal Soacha, Cundinamarca, Daniel Felipe encontró en su caballito de acero su gran pasión, con la que le hizo el quite a una realidad que no es desconocida para muchos: la delincuencia y las drogas.
“Me tocaba. Tenía que ayudarme para mis gastos, tenía que patrocinarme. Vendía chicles, maní, caramelos, gaseosas y me iba bien. En la casa nosotros teníamos lo justo, aunque a veces faltaba algo, pero no la comida, esos nunca”, recordó el ciclista colombiano a El Tiempo.
Ser protagonista en un Giro de Italia no es algo desconocido para el actual ciclista del Bora, en 2021 fue quinto en la general en una edición que tuvo olor a café con el campeonato de su compañero de equipo en el Ineos, Egan Bernal.
A medida que dio sus primeros pedalazos a nivel profesional, Martínez Poveda destacó en la contrarreloj, actualmente acumula cinco medallas en los Nacionales de ruta: cuatro de oro (2019, 2022, 2022 y 2024) y una plata (2018).
En 2015 consiguió uno de sus títulos más importantes: el de la montaña en la Ruta del Sur del 2015, prueba que ganó Alberto Contador, su ídolo, y en la que Nairo Quintana fue segundo.
La temporada siguiente, en 2016, perdió ante Egan Bernal la clasificación de los jóvenes del Giro del Trentino, competencia que hizo con el equipo Wilier Triestina.
En 2017 corrió en Cannondale, hoy Education Easy -Post, y ahí fue el mejor joven de la Vuelta a Turquía.
Pedalazo a pedalazo, Daniel ha logrado abrirse camino entre los mejores ciclistas así logró hacer parte de Ineos y ser determinante para Egan Bernal cuando fue campeón de la Corsa Rosa en 2021.
Para los amantes del ciclismo esa imagen donde Daniel alienta a Egan para que no pierda la batalla con Simon Yates en esa edición de la competencia italiana es la mejor explicación de porque Daniel Felipe se convirtió en un gregario de oro para el otrora campeón del Tour de Francia.
Definitivamente, Daniel Felipe Martínez nació para el deporte de las bielas y los pedales donde engrandece la leyenda de los escarabajos y con su pasión es un ejemplo para su familia, sus compatriotas y las nuevas generaciones que ven en él un ejemplo de superación y que los sueños se pueden hacer realidad.