El pasado 12 de marzo de 2025, el Gobierno nacional en cabeza del Ministerio de Educación, expidió el Decreto 0277, que establece condiciones más dignas para la jornada laboral de los docentes en Colombia, a través de una asignación académica justa para la atención directa en los establecimientos educativos.
La medida modifica el artículo 2.4.3.3 3. del Decreto 1075 de 2015, estableciendo que los directivos docentes y docentes estatales, deberán dedicar 6 horas diarias de permanencia en el aula a la ejecución de actividades curriculares y 2 horas de trabajo autónomo a la planificación de actividades complementarias, sumando así las 8 horas diarias de jornada laboral en funciones propias del cargo.
Mario Gómez, docente del departamento del Guaviare, celebró la entrada en vigencia del decreto porque, según él, de esta manera se estaría regulando la carga laboral que algunos directivos docentes establecen a los profesores:
“Hay docentes que permanecen hasta nueve o diez horas en los establecimientos educativos por directrices de sus directivos docentes (…) con el decreto 0277 se armoniza la jornada escolar y la jornada laboral”

En relación con esto, el decreto establece que la asignación académica semanal de los docentes corresponderá a 20 horas en el nivel preescolar, 25 horas para el caso de primaria, y 22 horas en el ciclo educativo básica secundaria y media.
Esta resolución no solo representa una reducción significativa en la carga laboral de los docentes, sino que también establece condiciones laborales más justas, fomenta el bienestar, y reconoce el tiempo que la mayoría de los docentes dedican a la preparación de clases y actividades.
“Lo que está haciendo este nuevo decreto es ajustar una deuda histórica que ha habido con los docentes, y es reglamentar su jornada laboral de permanencia (…) porque las horas adicionales no están siendo reconocidas con el pago de las horas extras” dijo a Radio Nacional de Colombia, Kristy Sánchez, profesora de una institución educativa en San José del Guaviare.
Este decreto que significa un paso importante hacia la dignidad laboral y el bienestar de los docentes, es resultado de los acuerdos alcanzados entre el Gobierno Nacional y la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) en julio de 2023, y entrará en vigencia desde su publicación en todos los colegios públicos del país.