En el municipio de Planadas, conocido como la "gema escondida" del sur de Tolima, vive Nelson Ruiz Murcia, un joven emprendedor que ha superado la adversidad para convertirse en un ejemplo de esperanza para los jóvenes de su comunidad.
Desplazado por la violencia junto a su familia, ha encontrado en la educación la herramienta perfecta para superar los años de conflicto armado que han afectado a su región. Ahora, está decidido a compartir su experiencia.
“Vengo de una familia campesina, humilde. Sin embargo, la guerra nos transformó. Mi mamá y mi papá vivían en la vereda Canoa Copete del municipio de Ataco, cuando de repente empezó un conflicto a muerte donde los trabajadores y campesinos fuimos los afectados. En 1997 nos tocó salir desplazados por la violencia huyendo para salvar nuestras vidas, llegamos al municipio de Planadas mis cinco hermanas y hermanos junto a mis padres. Allí arrancamos una nueva vida”, relató Ruiz.
La llegada a un territorio nuevo no fue fácil para Nelson y su familia. Solo sus maletas los acompañaban en un viaje lleno de incertidumbre. Para sobrevivir, realizaron labores que jamás habían hecho, la necesidad de adaptarse a un nuevo entorno y de encontrar formas de subsistencia les obligó a dejar atrás sus antiguas vidas.
Pero a medida que pasaban los días, Nelson comenzó a forjar nuevos sueños. Ya no era la guerra su propósito de vida. La destrucción y el sufrimiento que había vivido lo habían cambiado para siempre. Ahora, su objetivo era encontrar una forma de superar el pasado y de construir un futuro mejor para sí mismo y para su familia.
“En Planadas nacieron las ganas de salir adelante, la gente nos acogió muy bien, comenzamos a trabajar. Los vecinos fueron conociendo nuestro trabajo. También empezamos a prepararnos, a estudiar y eso nos dió la oportunidad de querer mostrarle al mundo que de la violencia salen cosas buenas. En nuestro caso el café se convirtió en la carta abierta para el mundo”, mencionó el atacuno.
Para Nelson, su lema o mantra que repite todos los días es: “La educación es la brecha más cercana de cerrar la pobreza y la ignorancia”, una frase que aplica al pie de la letra, ya que ha estado en varios cursos del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) que le han permitido capacitarse y tener conocimiento del proceso de café especial.
“Planadas viene creciendo empresarialmente y es gracias al café, pero esto por cuestiones del conflicto armado no lo sabíamos. Luego del Acuerdo de Paz entre el Gobierno nacional y las antiguas Farc-ep bajaron los hechos de violencia y se incrementó el trabajo colectivo en las comunidades, aprendimos a ser gobierno en nuestros territorios fuimos tomando otro rumbo y conociendo el potencial de la región”, manifestó el hijo adoptivo de la ‘gema escondida del sur’.
Agrega que: “el SENA llegó junto a otras instituciones que nos fueron formando y enseñando el sabor, la dulzura y toques mágicos del mejor café del mundo. Con el tiempo surgieron muchos emprendimientos y hoy en día le apostamos al turismo a la educación”
Un modelo para el país
En Planadas, se encuentra La Primavera, una vereda que fue testigo de la violencia más extrema, pero que hoy es un modelo para el país gracias al esfuerzo de su población, este mágico lugar se ha convertido en un ejemplo de desarrollo y progreso.
El turismo, la educación y los emprendimientos son solo algunos de los ámbitos en los que esta vereda ha experimentado un crecimiento significativo. La exportación de café, por ejemplo, se ha convertido en una de las principales fuentes de ingresos para la comunidad, y el mejoramiento del proceso de producción ha permitido aumentar la calidad y la cantidad de café que se exporta.
Además, la llegada de universidades con tecnologías de vanguardia ha permitido a los jóvenes de la vereda acceder a educación de alta calidad y desarrollar habilidades que les permiten competir en el mercado laboral.
“Esa vereda totalmente cafetera, es la más grande del municipio de Planadas, está ubicada a una media hora del casco urbano; ha avanzado en obras que se están haciendo con la comunidad, aprendimos a ser gobierno, a no esperar que el Estado nos de todo, sino que entre todos mancomunadamente podemos hacer placas huellas, arreglar escuelas, caminos, carreteras. Podemos decir que llegamos a esa paz, a una paz que nos da armonía, donde trabajamos como hermanos todos” asegura Murcia.
Villa Sofía Coffee
Complementando los desarrollos de su vereda y aprovechando la tradición caficultora que se remonta a cuatro generaciones, Nelson decidió seguir los pasos de su familia y crear su propio emprendimiento en el sector. Así nació Villa Sofía Coffee, un proyecto que combina la pasión por el café con la innovación y la calidad. Con su negocio, este emprendedor busca no solo producir un café especial sino también promover el desarrollo sostenible de su comunidad y preservar los aspectos socioculturales de sus paisanos.
“Sabemos que el café tiene muchas propiedades tanto en el grano como en la pulpa, en Villa Sofia Coffee no se pierde nada, no solo sacamos café de alta calidad, tenemos semi café, variedad castilla, colombianas, borbonés rosados y hemos aprendido a hacer procesos tanto naturales como honey, triple lavados, hidrolavados, triple fermentación, también aprovechamos sus derivados como la cáscara y hacemos dulces, arequipes, tortas, postres, todo a base de café.” comenta Nelson.
Ruiz ha tenido la oportunidad de participar en varias ferias y eventos importantes del sector cafetero. Uno de los momentos más destacados fue su participación en la Feria Internacional de Café en Planadas, donde más de 20 compradores de todo el mundo se reunieron para descubrir las mejores marcas y sabores del café colombiano.
La Feria Internacional de Café fue un éxito rotundo para Villa Sofía Coffee, ya que Nelson y su equipo pudieron mostrar su producto a un público internacional y establecer valiosas conexiones con compradores y expertos del sector.
“En las Ferias queremos mostrar nuestro turismo alrededor del café, ofrecer avistamiento de aves, mostrar cómo vivimos, cómo nos alimentamos, el medio ambiente, la fauna, la flora y los procesos. Entonces vamos avanzando, creciendo históricamente y demostrando que Planadas ahora es un territorio de paz y transformación” argumenta el caficultor
Además, tiene planes de mejorar su finca para que los futuros turistas puedan experimentar la riqueza cultural y la belleza natural de su región. El Nevado del Huila, la Ruta al Cauca y la entrada al departamento del Tolima son solo algunos de los atractivos que esta región tiene para ofrecer.
Con una visión ambiciosa y un corazón lleno de pasión, Nelson y su emprendimiento familiar están listos para enfrentar nuevos desafíos en el próximo año. Su objetivo es seguir perfeccionando su inglés y conquistar los mercados internacionales, llevando el sabor y la calidad del café colombiano a todos los rincones del mundo.