La popularidad del presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha crecido entre sus compatriotas desde que comenzó la ofensiva militar sobre Ucrania el 24 de febrero, según una encuestadora considerada independiente del Kremlin y cuyos resultados difieren radicalmente de la imagen que tiene el mandatario fuera del país.
El sondeo de marzo del Centro Levada, un instituto teóricamente imparcial, refleja un repunte en la imagen de Putin, cuya labor aprueban ya un 83 por ciento de los ciudadanos. Sube doce puntos en un mes y alcanza niveles inéditos desde julio de 2017.
Solo un 15 por ciento de los encuestados critican la gestión del presidente, si bien el dato asciende al 27 por ciento si se pregunta por todo el Gobierno. El Ejecutivo tiene una popularidad del 70 por ciento, un punto menos que el primer ministro, Mijail Mishustin.
El Kremlin ha endurecido la censura política y mediática desde que Putin dio orden de lanzar su ofensiva, castigando incluso a quien utilice términos como "invasión". La presión se ha traducido en el cierre de medios y de redes sociales, lo que complica que la ciudadanía pueda obtener información al margen de los canales oficiales.
Esta misma semana, uno de los medios independientes de referencia, 'Noaya Gazeta', anunció que paralizaba su publicación hasta el fin de la guerra, ya que a pesar de acatar el vocabulario impuesto por el Kremlin seguía recibiendo avisos del organismo regulador que amenazaban con su potencial cierre.
Fuera de Rusia, en cambio, la imagen de Putin se ha desplomado. En Estados Unidos, por ejemplo, ha caído a un mínimo histórico, según un sondeo del Pew Research Center que sitúa el nivel de rechazo en el 92 por ciento. Apenas un seis por ciento de las personas entrevistadas en este estudio confían en el mandatario ruso.
En cambio, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha ganado en popularidad, ya que un 72 por ciento de los estadounidenses confían en él, por delante incluso de los datos de los principales líderes de Francia, Emmanuel Macron (55%), de Alemania, Olaf Scholz (53%), y de Estados Unidos, Joe Biden (48%).
Dentro de Rusia, la visión es muy diferente. El Centro Levada estimaba en febrero que el 48 por ciento de los ciudadanos tenía una imagen negativa de la Unión Europea, con solo un 37 por ciento de respuestas positivas.
Si se pregunta por Estados Unidos, el nivel de rechazo se eleva al 55 por ciento, según este estudio, que en este tipo de preguntas aún no reflejaría las consecuencias de la invasión de Ucrania y de las sanciones adoptadas en bloque por los gobiernos occidentales.