El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, se declaró conmocionado con la tragedia: “El mundo del fútbol está conmocionado tras los trágicos incidentes ocurridos en Indonesia al final del partido entre el Arema FC y el Persebaya Surabaya en el estadio de Kanjuruhan", fue el mensaje publicado en inglés en la cuenta oficial del ente rector del fútbol mundial a través de su cuenta oficial en la red social Twitter.
La Asociación de Fútbol de Indonesia (PSSI), la Confederación Asiática de Fútbol, y el presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), condenaron el hecho que hoy enluta el deporte en el mundo. Mientras que en La Liga de España se implementaron minutos de silencio en los partidos de la fecha siete “LaLiga y la RFEF han acordado un minuto de silencio para mostrar sus condolencias al pueblo indonesio, especialmente los familiares de los fallecidos en la tragedia del Estadio de Kanjuruhan, en la isla de Java, así como desear una pronta recuperación a los heridos durante los incidentes” señala en el comunicado oficial publicado en Twitter.
También el Barcelona de España se sumó a las voces de rechazo “El FC Barcelona se suma al dolor por la tragedia en el estadio de Kanjuruhan en Indonesia y rechaza cualquier acto de violencia dentro y fuera de los estadios” publicó en sus redes sociales.
La Premier League de Inglaterra por su parte, también se pronunció en contra de los desmanes y envió un mensaje de solidaridad a los familiares de las víctimas “Los pensamientos de todos en la Premier League están con los afectados por los trágicos eventos en el estadio Kanjuruhan anoche”.
La tragedia de proporciones sin precedentes registrada en el estadio Karnjurhan en la ciudad de Malang en Indonesia, dejó al menos 127 personas fallecidas, luego del enfrentamiento entre cientos de personas que invadieron la cancha y la policía, que utilizó gases lacrimógenos. Esto provocó una estampida que deja como saldo una de las mayores tragedias de la historia en un estadio de fútbol.
El partido entre el Arema FC y el Persebaya Surabaya, iba 2-3 a favor del visitante, siendo la primera derrota en dos décadas ante este equipo. Lo que enfureció a cientos de seguidores del Arama, que sin mediar ningún razonamiento se volcaron a la cancha, a lo que la policía respondió con la utilización de gases lacrimógenos, cientos de personas entraron en pánico.
Los destrozos en el escenario deportivo con capacidad para 42.000 personas, dejaron además vehículos incendiados y cientos de heridos. Este lamentable hecho se presenta en el país que pretende organizar el Mundial Sub-20 de la FIFA en mayo de 2023.