John Smith Rincón es firmante del Acuerdo Final y ahora motor de la Fundación Paz y Esperanza, una organización que propende por la ocupación del tiempo libre de niños, niñas y jóvenes para alejarlos de flagelos como las drogas y el reclutamiento forzado.
“La idea de crear una fundación nació cuando estaba en la cárcel donde el 90%, o quizás un poco más de los jóvenes que estaban allí, fumaban marihuana, entonces surgió la idea de crear un espacio donde trabajáramos para rescatarlos, pero con el paso de los días y en ese ejercicio de la vida -la cárcel es la universidad de la vida- pues determiné que era más fácil prevenir que curar, de esa manera nació la idea de crear la fundación”, comenta John Smith.
Ya en libertad y como firmante de la paz, John Smith buscó apoyos y creó la Fundación Paz y Esperanza, cuyo objetivo es que los niños, niñas y jóvenes de Algeciras -su tierra natal y el municipio duramente golpeado por el conflicto armado- encuentren en el deporte, la cultura y la recreación, la mejor alternativa para alejarse de la delincuencia, las drogas y también de ese reclutamiento del que él fue víctima.
“En este momento tenemos 120 familias inscritas, más o menos 78 niños que están vinculados con nosotros, que hacen parte de las escuelas de formación, especialmente a través del fútbol”, dice con evidente orgullo, recalcando que se orientó por el fútbol por ser el deporte que a él más le gusta y por ser la pasión de muchas personas en el mundo.
Las actividades se realizan en la Villa Olímpica del poblado, en polideportivos de los barrios, lugares donde realiza campeonatos y encuentros amistosos que reúnen, no solo a niños y niñas, también a las familias que disfrutan al ver el crecimiento físico y mental de sus hijos.
“Hay un par de casos significativos que nos generan felicidad. Uno en particular es el de una chica que está con nosotros desde que iniciamos la Fundación. La hemos visto crecer y hoy es una quinceañera, a ella le conseguimos una beca y hoy está en una escuela aprendiendo de café, de barismo, ella encontró un proyecto de vida y está feliz, se identifica con eso que está aprendiendo y quiere más. Ya estuvo en el Cauca aprendiendo y trabajando, ahora queremos que viaje a Pitalito y estamos buscando que sea a través de la Federación”, comenta.
John Smith Rincón fue reclutado siendo un niño en zona rural de Algeciras. “Llegué a las Farc como a los 13 años y allí estuve hasta el problema judicial que me envió a la cárcel, pues lastimosamente por estar en uno de los municipios donde se vivió con tanto énfasis el tema del conflicto, pues resulté inmerso”, narra sin dar muchos detalles, tal vez porque para él es más importante el presente que construye todos los días.
“Es con estas acciones que se construye paz, donde los niños tengan otros espacios. Yo digo que, si yo hubiera tenido estos espacios cuando niño, tal vez no hubiera estado donde estuve, pero como no tuvimos esa oportunidad, pues pasó lo que ya les conté”, y termina John Smith con un mensaje para todos los colombianos: “La paz se construye entre todos y cada uno puede colocar su granito de arena”.
Ejemplos de paz y resiliencia
En este especial de Onda Pacífica, proyecto colaborativo entre las emisoras de paz de Radio Nacional de Colombia y Colombia+20 del diario El Espectador, también presentamos las historias de “Mujeres por un nuevo Paraíso” y “Coocafepaz”, esta última una de las experiencias más exitosas en materia de reincorporación económica y social.
La Asociación de Mujeres por un nuevo Paraíso reúne alrededor de 30 mujeres campesinas que llevan años trabajando por la construcción de paz, en procura de reparar los tejidos que el conflicto fragmentó en sus vidas. Ellas y sus familias viven en el centro poblado El Paraíso, un lugar que, por la conexión directa con el departamento del Caquetá, fue en años anteriores un corredor estratégico para el conflicto.
En Coocafepaz, hombres y mujeres firmantes del Acuerdo cultivan café y sueñan con poder exportarlo. Esta iniciativa nació de 23 excombatientes que salieron del antiguo ETCR de Miravalles y ahora están en Algeciras vinculándose al rol familiar.