El asesinato en la ciudad de Cali del artista urbano Junior Jein, la noche del pasado domingo 13 en momentos en que se aprestaba a hacerse partícipe de la programación de una discoteca en el sur de la capital vallecaucana, conmociona nuevamente a un país que pareciera buscar la reconciliación y la paz sin otra guía que las brazadas de ahogado.
Durante años, Radio Nacional de Colombia fue, y seguirá siéndolo, la casa del “Caballo”, como solía conocérsele cariñosamente al cantante de las rastas, enorme sonrisa y talento desbordante que nunca dejó de ver en sus canciones por su gente, por la defensa de una estética que abordó las tradiciones desde los lenguajes contemporáneos, y por los desfavorecidos de su Buenaventura natal que lo vieron como un ejemplo a seguir.
“¿Quién interrumpió sus sueños?”, es la pregunta que se hizo en redes la cantante Adriana Lucía al conocer la noticia.
Al igual que ella, tras la confirmación del asesinato de Harold Angulo Vencé, su nombre de pila, sus colegas dieron a conocer su rabia y enorme dolor a través de sus redes sociales. Goyo, cantante de ChocQuibTown, fue una de las primeras en manifestarse: “Mataron a Jein porque en Colombia el talento no alcanza, ni es suficiente. La vida de los negros no vale. La juventud en Buenaventura siempre estuvo sola. Fortaleza a su familia. Estamos llorando carajo”.
Así mismo su colega en el campo del hip -hop, el quibdoseño Alexis Play, aseguró: “Este corazón ya no aguanta más grietas, las lágrimas están escaseando. Viaja tranquilo a la inmensidad, maestro de la Alegría. ¡Gracias, Cabaio inmortalizado!”
Sus versiones de ‘La negra Tomasa’, ‘El porteñito’ y ‘Si Dios fuera negro’, así como temas propios que exploraban la realidad social de su tierra y muchas otras composiciones que invitaban a unirnos a través de la ceremonia del goce, fueron la materia prima para una exitosa carrera iniciada hacia 2004 en su puerto natal en los senderos del hip - hop, las sonoridades del Pacífico y la salsa choke.
“El Caballo” o “El Señor del Pacífico” había nacido en julio de 1982, se trasladó a Cali y estudió algunos semestres de publicidad. Posteriormente, fue DJ y productor musical. Desde su primer lanzamiento hace 15 años, ‘Pegando duro’, se convirtió en un referente de esos nuevos movimientos. Quedan, como pruebas de su paso por el mundo, éxitos siempre bailados en el occidente colombiano como ‘Turín, turán’, ‘Bam bam bilan’, ‘Bien bacano’ y ‘Puro vacilón’. Recientemente lo habíamos tenido en rotación acompañando al artista nariñense Richie Marea en su tema ‘Un amor bonito’.
En una de las líneas de ‘¿Quién los mató?’, más que una canción un manifiesto y un alegato contra toda violencia – en especial por los cinco niños asesinados en Llano Verde –, el cantautor manifestaba con crudeza: “nada, la vida de los negros no importa nada, / lo primero que dicen es: ‘andaban en cosas raras’”. Hoy, aquello retumba como un manifiesto del horror que hoy nos produce la noticia de su muerte.
La Radio Nacional de Colombia se une a las manifestaciones de rechazo y tristeza por el asesinato de Junior Jein. Su obra permanecerá como un canto por la vida, los derechos y la tolerancia.