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Escribiendo en los muros de la ciudad

Hablemos de los artistas urbanos, de sus técnicas y sus mensajes.

Por @aurekk

Más allá de las calles, los edificios y los muros que componen las ciudades, hay miles de historias que se van gestando en cada rincón, en cada cuadra, en cada barrio. Y así como surgen esas historias, también se hace necesario encontrar el espacio para exponerlas de manera personal hacia la gente.

Especialmente en Bogotá, en estos últimos años, se ha evidenciado una explosión de colores y formas que se han tomado las paredes de toda la ciudad. Los antiguos muros grises, en muchos casos llenos de rayones o afiches, ahora se encuentran con muestras llenas de arte de sus expositores callejeros. El llamado arte urbano se ha tomado la capital y cada vez toma más fuerza.

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Rostros, escenas, llamados a la unión social son muchas de las formas en las que estos nuevos artistas utilizan la ciudad para expresarse. Sin embargo, hay algunos más reservados, que ven en cada pared una forma de mejorar su propia técnica.

Y ese es el caso de Zurik, una artista urbana cuyos trazos tipográficos llenos de colores, formas y relieves dan vida a muchas calles bogotanas.

Hablé con ella para conocer qué hay detrás de su obra y cómo es su forma de trabajar.

Foto: Zurik

Zurik comenzó a pintar las calles a sus 19 años. Sin embargo a eso de los 14 años ya estaba haciendo sus primeros grafitis en los cuadernos.

Ella es una diseñadora gráfica de la Universidad Nacional de Colombia que desde hace más de 6 años ha estado pintando los muros, no sólo de Bogotá, sino que ha llegado a otros países, buscando cada vez nuevas formas y técnicas de dar color a sus ideas.

Foto: Zurik

Su propuesta no es de nuevos medios, ella quiere utilizar los materiales que tiene a la mano para explotar toda su creatividad. "Me gustó mucho mezclar objetos y personajes con letras y creo que hay mucho que explorar en ese campo" dice Zurik.

Cada obra que ejecuta tiene un proceso ya delimitado. Comienza con bocetos rápidos, si son cosas que se van a llevar a la pared sin mayor complejidad.
Dibuja esos bocetos a lápiz. Primero, escoge una temática, luego adapta los colores y los elementos.

"No busco contar una historia o llevar un mensaje, busco la riqueza visual en mi propuesta. Cómo lograr mayor volumen en una pieza utilizando menos colores, por ejemplo".

Foto: Zurik

A los bocetos les pone descripciones para recordar el orden de las cosas, como consejos para ella misma en la ejecución. Qué color va primero, cómo hacer una línea, etc. Y claro, es necesario una lista de las cosas a comprar, organizar el presupuesto.

Luego en Photoshop planea el cómo se verá con lo que tiene. "Es importante irse adaptando al espacio. No acostumbro a hacer montajes. Mis bocetos son unas guías más no una copia fiel, así que no hago cuadrículas ni nada más. Ese boceto inicial es seguro que cambiará en la ejecución", concluye.

"Me gusta levantarme muy temprano cuando voy a trabajar. Así aprovecho mejor la luz del día, porque con el transcurrir de las horas, esta cambia. Siempre prefiero comenzar en la mañana y que a eso de las 2 o 3 ya esté terminando, así logro una mayor fidelidad a lo que me planteé al comienzo".

Capas y capas de pintura van formando la obra que en pocas horas estará adornando algún muro en la ciudad. Para terminar, una foto que entrará en su portafolio y listo, de vuelta al inicio.

Foto: Zurik

¿Cómo ve el panorama actual del arte urbano en el país?

"Creo que, al contrario de otras épocas, ahora es más fácil hacer arte urbano. Es más aceptado y se le da mucha relevancia a esto. Como en cualquier otra disciplina hay que tener constancia y disciplina para poderlo hacer, apasionarse. No sólo es mi hobby, sino que además es mi trabajo. Siento que últimamente todo mundo se va hacia el lado de la ilustración, el realismo, las escenas. Yo propongo pintar letras y utilizar colores y efectos que les den un toque diferente a lo que se ve normalmente. Ese es mi sello. Lo que más puedo aportar es la calidad de la técnica, algo que se ve y que he trabajado mucho. Veo un gran boom de grafiti y arte urbano en Bogotá, pero siento que a nivel nacional siento que crece pero no al ritmo de Bogotá. Los festivales, que ahora son muchos, ayudan a que se lleven muestras a diferentes regiones. Siento que los festivales atraen gente, mueven la cosa, pero también siento que le hace falta mayor apoyo a la escena local para que se hable de un crecimiento significativo".

Así que ande con la mirada levantada del suelo cuando transite por las calles de Bogotá, podrá ver mucho color y conocer todas esas historias que se esconden en los muros. Seguramente, entre todo el caos de la ciudad, podrá ver la obra de Zurik, una joven que busca escribir la ciudad.

Foto: Zurik

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