Mujeres carrangueras: un movimiento que reivindica su papel en la música campesina
La historia de la música carranguera hecha por mujeres viene desde las cantoras de Guabinas, o Guabineras, que se escuchaban en los campos de maíz cuando había cosecha para alegrar las largas jornadas en Santander, o en las tardes de reunión de las mujeres tejedoras en Boyacá, mujeres campesinas, que más allá participar como intérpretes o compositoras de esa mezcla de rumba criolla, bambuco fiestero y otros ritmos campesinos que el maestro Jorge Velosa unió para crear la Carranga, ya hacían parte de los cantes campesinos desde tiempos ancestrales.
La carranga, que en los años 80 y 90 vimos en escenarios de los pueblos del interior del país con hombres de ruana, bigotones y barbudos empuñando tiples, requintos, guitarras y guacharacas, hoy está cambiando y hoy la vemos en festivales, ferias y fiestas interpretadas por mujeres de cachetes colorados, trenzas, faldas campesinas floridas, anchas y largas y también de pantalones, mujeres que han tenido un camino pedregoso para ser tenidas en cuenta, pero que actualmente pueden contarse por más de 30 los grupos formados por mujeres representantes de este género campesino.
En municipios de Cundinamarca, Santander y Boyacá se ha ido forjando un interesante movimiento de mujeres en La carranga, Radio Nacional de Colombia habló con Ricardo Martinez, representante del Son del Frailejón, agrupación formada por mujeres en Guasca, Cundinamarca, que hará parte de La noche Radio Nacional, y quien ha investigado sobre tema:
“Las guabineras fueron referentes de las mujeres en la música campesina. Luego empezamos a escuchar, después de un álbum de Jorge Velosa: Cantas y relatos, álbum de investigación de la música campesina, las voces femeninas. Y más adelante conocimos a una de las primeras representantes de La Carranga: La Comadre Ena y sus ahijaos, de Duitama, quien lleva en la carranga al menos 40 años” Ricardo Martínez.
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La Comadre Ena recuerda que sus inicios fueron en los años 80:
“En Nobsa le hicimos un homenaje al maestro Jorge Velosa y a él le llamó mucho la atención que una mujer como yo tocara tan bien el requinto y representara a la carranga, por eso me solicitó para acompañarlo un día en Duitama en la tarima, yo toqué con él y sus carrangueros y desde esa época vengo haciendo carranga, primero con el Grupo Cristal, después con el profe Emiro Mendez formamos La Comadre Ena y sus ahijaos, con el grupo llevamos 25 años, también hicimos el grupo Las comadres, de solo mujeres, incluída mi hija, con ellas tuvimos varias generaciones, hicimos talleres infantiles y ganamos varios concursos nacionales como el Guane de oro” Cuenta La Comadre Ena.
En el nuevo milenio las agrupaciones formadas por mujeres son más visibles y muchas de ellas vienen de procesos de escuelas de formación.
Parte del interés que ha crecido en las participantes de estas agrupaciones viene desde la creación del Festival “Convite Cuna Carranguera” en manos de Eduardo Villarreal, un bogotano amante de las costumbres campesinas, quien con el apoyo del maestro Jorge Velosa, creó este festival en 2008 y ha recibido montones de agrupaciones carrangueras de todo el país, entre ellas muchas compuestas por mujeres.
Villarreal también fundó la Academia Real de Música Campesina, una pequeña escuela que ha enseñado a niñas, niños y jóvenes las bases de la música campesina.
“Hay un auge de mujeres en la carranga que vienen de procesos de escuelas formación como El Son del Frailejón, La primas de la Carranga de Chocontá, en Tocancipá, las Muñecas, en gachetá Dulzura carranguera, Anhelos, La carrangueras de Majú, de Cota, Monte violeta y muchas otras. Hay varias apuestas muy bonitas frente a estas músicas campesinas hechas por mujeres” Explica Ricardo.
En 2018 conocimos en un reality de televisión a “La Carranguerita” una niña de apenas 8 años de Sogamoso, Boyacá, quien lleva en sus venas el arte campesino, ella quiere mantener la tradición de sus abuelos y llevarle letras del cuidado del campo, del paisaje campesino y el amor por lo nuestro a los niños como ella en el mundo, lanzó su primer álbum en marzo de 2023 y mantiene su estilo carranguero.
Para Ricardo Martínez lo más importante es que las mujeres se sientan representadas en el escenario carranguero:
“Cuando las mujeres ven que en una agrupación carranguera hay mujeres como intérpretes de instrumentos, voces, o como sea, sienten que ellas también pueden hacer parte de estos grupos, es muy importante que en las escuelas, en las universidades y en todos los espacios campesinos las mujeres se vean representadas para así continuar creciendo con grupos formados por ellas” Dijo Ricardo
