Por: Angélica Blanco Ríos, Radio Nacional Santander
Este departamento, turístico por excelencia, reporta hoy pérdidas incalculables y miles de personas han quedado desempleada tras el cierre indefinido de sus lugares de interés. Expertos calculan que el sector tardará dos años en recuperarse.
A Nelson Ramírez la vida y el amor por la historia y los rincones que la guardan, lo convirtieron en guía turístico. Vive en Los Santos, municipio anclado en el Cañón del Chicamocha y uno de los más afectados tras la emergencia sanitaria, al igual que Barichara, la provincia de Vélez, y muchos que, como éstos, subsistían de la entrada de personas que llegaban a conocer más sobre Santander.
Como él, son cientos de operadores y empresas, dedicadas a este sector, las que desde hace más de tres meses, época en la que se cerraron fronteras para evitar la propagación del Covid-19, no reciben ni un solo cliente y por ende, ni un solo peso.
“Me he visto afectado porque toda la vida trabajé haciendo caminatas, llevando gente a las cuevas y esto me obligó a cambiar de trabajo. Económicamente estoy mal. Antes, me ganaba 150 mil en un fin de semana, ahorita no me gano absolutamente nada. Han pasado épocas importantes: Semana Santa o vacaciones de mitad de año y esto no solo me afecta a mí, sino a todos los hoteles, restaurantes y en general a otros sectores que también dependen de los turistas. Además, no hemos recibido mucho apoyo y lo peor es que no se ven soluciones pronto”, asegura Ramírez.
Pero en este recorrido, de conocer cómo se recuperarán las regiones, Mery Luz Hernández, secretaria de Cultura y Turismo departamental, afirma que el empuje y emprendimiento, logrará que todo vaya por buen camino.
“Este departamento es uno de los más afectados porque fue el primero en cerrar fronteras, razón por la que la emergencia sanitaria ha generado pérdidas incalculables y miles de personas han quedado sin empleo. Sin embargo, la idea es empezar a mirarle el lado bueno: reinventarnos y encontrar la oportunidad de apostarle a la virtualidad y reestructurar todo lo que veníamos haciendo con el único propósito de internacionalizar los atractivos del departamento”, explica.
Antes, vía aérea ingresaban 175 vuelos diarios a Santander, desde que inició la pandemia solo lo han hecho las rutas humanitarias e igualmente ocurre con las empresas de transporte terrestre que solo están funcionando en un 3%, según datos de este despacho.
“Los hoteles hoy no tienen ni siquiera un 20% de ocupación y el proceso de recuperación estimamos va a tardar hasta dos años”, añade la funcionaria.
Entre tanto, empresarios y autoridades, coinciden en que los diferentes paisajes, pisos térmicos y territorios coloridos, fríos y cálidos, tienen que reabrir pronto sus puertas, “sobre todo el turismo de naturaleza. Aquí tenemos muchos atractivos al aire libre y, pese a que el virus siga activo, somos una de las regiones que ha logrado darle un buen manejo a la pandemia y el sector está trabajando por tener todos los protocolos listos”, dice la secretaria Mery Luz Hernández.
Por ejemplo, en el Parque Cerro del Santísimo y Panachi, “ya tenemos todo listo e instalamos un tapabocas gigante en una de las esculturas más conocidas, para enviar un mensaje de autocuidado, pero también para pedirle al Gobierno Nacional, que los espacios abiertos podamos dar inicio, porque ya tenemos protocolos y elementos para arrancar. Además, esta sería una buena opción para la ciudadanía que lleva encerrada tanto tiempo en el marco de la cuarentena, tenga un aire distinto porque tenemos que irnos acostumbrando a vivir con el virus”, explica Uriel Fernando Mendoza, director de la Coorporación Parque Nacional del Chicamocha, quien afirma que las pérdidas para esta empresa han sido de 3 mil 500 millones de pesos, pero además, los campesinos también se ven afectados.
¿Qué viene para este sector y para el transporte terrestre y aéreo?
Hoy, en manos de los alcaldes de los 87 municipios, está la decisión de si empezarán a darle apertura a estos sectores.
En Bucaramanga, desde el 1 de julio, los restaurantes que cumplan con protocolos sacarán las mesas a las vías de la región, para empezar a ofrecer sus servicios, con cartas virtuales y reservas anticipadas.
Este mismo día, también empezarán a operar siete rutas de transporte intermunicipal, cuyas empresas tienen trabajando solo al 3 % de sus empleados y registran pérdidas que superan los 7 mil millones de pesos. Desde el miércoles podrán funcionar solo con el 50 % de la capacidad de los vehículos y exigiendo el uso de tapabocas y toma de temperatura, desde Bucaramanga, San Vicente de Chucurí, Barbosa, Socorro, San Gil, Málaga, Barrancabermeja y Sabana de Torres.
Entre tanto, los afectados, se seguirán reuniendo con la administración departamental, para seguir en busca de la certificación de bioseguridad turística, implementación de protocolos e inclusión del tema de la virtualidad.
La administración departamental aseguró que están gestionando apoyos económicos para que el sector pueda acogerse a los cambios que esta nueva realidad plantes. Asimismo anunció el lanzamiento de una plataforma para dar a conocer los destinos naturales de la región, “y decirle a Colombia y al mundo, que Santander será un territorio seguro”, concluye la secretaria de turismo.