Claves del plan piloto de reapertura de servicios religiosos en Colombia

Por: María Camila Sánchez

En días pasados, el Gobierno Nacional emitió la Resolución 1120 en la que se fijaron los protocolos de bioseguridad para la reapertura gradual de los servicios religiosos en municipios no Covid y municipios con baja afectación por este virus. Esta estrategia se busca implementar a partir de un plan piloto que durará 15 días, con un aforo máximo de 50 personas y una segunda fase con un aforo del 35 por ciento de capacidad en los recintos.

Claudia Cuellar, directora de Promoción y Prevención del Ministerio de Salud y Protección Social, explicó en Contacto Directo que, después de una serie de reuniones con el Ministerio del Interior y líderes de diferentes denominaciones religiosas, se fijaron las condiciones para estos dos pilotos que tienen como propósito reanudar una actividad que resulta fundamental para buena parte de la población, cumpliendo con estrictas medidas de bioseguridad.

De acuerdo con la normativa, cada entidad religiosa deberá adaptar el protocolo de seguridad a sus ritos propios de su tradición y creencia, pero será labor de las alcaldías municipales o distritales velar por su correcto cumplimiento.

“El procedimiento contempla que los alcaldes de esos municipios liderarán los pilotos que se aprueben en algunas iglesias, por supuesto no será en todos los recintos religiosos, sino que se dará solo en un número reducido”, puntualizó.

Lo primero que se debe definir es si su territorio hace parte de la lista de municipios no-Covid o con baja afectación que está publicada en el portal del Ministerio de Salud.

Luego de confirmar si hace parte de los municipios designados, los líderes religiosos, junto con los alcaldes deberán evaluar el cumplimiento de los protocolos establecidos en la resolución para solicitar oficialmente al Ministerio del Interior su aprobación para hacer parte del plan piloto.

“Haciendo un análisis previo el Ministerio puede evaluar, y en común acuerdo con alcalde de ese municipio, dar la autorización para que las iglesias hagan la apertura gradual. Esta autorización se dará solo si se cumplen todas las medidas establecidas y serán las secretarías de salud y del Ministerio estar al tanto de esa evaluación”, indicó Cuellar.

Medidas para los responsables en los recintos religiosos

Antes de llegar

• Los feligreses deben ser informados sobre los horarios y nuevas disposiciones para los servicios religiosos.
• Adelantar una inscripción previa para las asistencias a la congregación, ya sea por teléfono o correo electrónico.
• Todas las personas que apoyan en la logística y ofrecen algún servicio durante los actos religiosos deberán ser capacitados en medidas generales de bioseguridad y sobre la identificación de signos y síntomas del Covid-19. Estas personas deberán usar tapabocas y protección ocular.
• Se prohibirá la entrada a personas con fiebre, de niños, niñas y adolescentes, personas con enfermedades como hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardiovasculares, cáncer, VIH, obesidad, desnutrición y mayores de 60 años.
• Habrá que desinfectar todas las instalaciones.
• Las sillas se deben ubicar en zigzag.
• Establecer mecanismos para garantizar el distanciamiento de dos metros antes del ingreso de los feligreses al recinto.

Al ingresar

• Llevar registro de las personas que ingresan.
• Se tomará la temperatura a todas las personas.
• Será de obligatorio cumplimiento el porte del tapabocas.
• Quienes ingresen tendrán que desinfectar sus manos con alcohol glicerinado así como también las suelas de sus zapatos.
• Las ceremonias no deberán durar más de una hora.

“Hemos pedido, de forma respetuosa, que las ceremonias no duren más de una hora para poder dar una mayor frecuencia y dar el tiempo necesario entre cada ceremonia para poder hacer una limpieza y desinfección de todo el recinto”, dijo Cuellar.

Dentro del recinto

• Todos los asistentes deberán estar sentados.
• No se compartirá papelería o documentos de mano a mano.
• Deberá haber aireación natural o ventilación de los lugares de culto con puertas y ventajas permanentemente abiertas.
• No se permitirán actividades que impliquen la manipulación de alimentos.
• Se deberá garantizar el uso de los baños públicos con la disposición permanente de agua, jabón y toallas desechables.

A la salida

• El personal de logística debe garantizar que no se rompa el distanciamiento físico de dos metros entre personas.

Medidas para los feligreses

• Registrarse a través de las vías habilitadas por los líderes religiosos para su respectivo ingreso.
• Al salir de sus viviendas deben dirigirse directamente hacia los recintos religiosos y al finalizar, regresar a sus viviendas.
• Velar por el distanciamiento físico.
• Acceder al cumplimiento de los protocolos de desinfección que implementarán las iglesias.
• Deberán permanecer en el mismo lugar durante el desarrollo del servicio religioso.
• No estará permitido llevar cirios, velas o velones y se recomienda evitar portar carteras u objetos no necesarios para la celebración.
• No podrán saludar de besos ni abrazos.

“Hay que dar tiempos y espacios para que las personas que ingresan cuenten con una desinfección previa y una vez en el recinto se mitigue el riesgo. Así mismo cuando salgan se tendrán que efectuar las medidas de desinfección y alistamiento para el siguiente servicio”, explicó Cuellar.

Una vez los alcaldes avalen la adopción de las medidas necesarias por parte de los líderes religiosos para dar cumplimiento de las medidas anteriores, podrán solicitar al correo covid19@mininterior.gov.co el permiso para iniciar el plan piloto.

Conozca aquí la resolución completa del Ministerio de Salud que reglamenta los planes piloto de reactivación de servicios religiosos.