Tras el desplome de unas 70 casas en el municipio de Piojó, Atlántico, 89 familias fueron reubicadas en albergues temporales instalados por las autoridades. Esta fue la primera acción del plan de contingencia mientras se reciben más ayudas y se realizan estudios para medir el daño que ha sufrido el suelo.
La gobernadora de Atlántico, Elsa Noguera, por medio de su cuenta en Twitter, pidió al director nacional de Gestión del Riesgo, Javier Pava, que brinde apoyo para que se "realice el estudio por remoción de tierra en Piojó, específicamente en los barrios Camino Grande, Santa Fe, Bomba y el sector del cementerio", solicitó.
Precisamente, el camposanto municipal resultó afectado con el deslizamiento que agrietó la carretera de acceso. Según los organismos de socorro, una de las prioridades es restaurar las bóvedas que resultaron resquebrajadas en medio de la emergencia.
Tras un puesto de mando unificado, las autoridades locales anunciaron la entrega de subsidios de arrendamiento de tres meses para familias que perdieron su vivienda, además, el cierre del cementerio y el llamado de alerta a poblaciones cercanas, para que atiendan a las personas de Piojó que requieran exequias.
La emergencia es una de las múltiples que se han registrado durante el fin de semana en el Atlántico, en medio de una seguidilla de lluvias que el Ideam había pronosticado para este fin de semana.
Además de Piojó, en Atlántico hay emergencias a cuenta de las lluvias en Puerto Colombia, Tubará y Repelón.