‘El que no sabe, es como el que no ve’
‘El que no sabe, es como el que no ve’
En el cuarto episodio se recrea la historia de Yesid, un campesino del Urabá antioqueño que en el corregimiento El Naranjo fue estafado con una promesa de compraventa.
Para demostrar que Yesid compró sus tierras de buena fe, su esposa Leonor se dirigió a la Unidad de Víctimas donde un equipo jurídico verificó que la pareja de campesinos si pagó el precio comercial por El Naranjo, pero no completó el proceso legal de la compra.
Luego de radicada la solicitud, la Unidad de Víctimas presentó los documentos del predio El Naranjo ante un juez de Restitución de Tierras, quien un tiempo después permitió que a la familia de Yesid le fuera adjudicado otro predio similar pero en el sector de El Aguacatal.
Es decir que un año después de iniciados los tramites pasaron de ser poseedores a propietarios. El Aguacatal al igual que otros, era un terreno baldío que gracias a la Reforma Rural se entregó a varias familias como a la de Yesid.