Hace pocas horas las autoridades en Caquetá confirmaron el asesinato de Jair Danilo Calderón Aranda, quien fue hallado sin vida en la madrugada del pasado lunes en la vereda La Luna, zona rural del municipio de San José del Fragua.
De acuerdo con el coronel Óscar Lamprea, comandante de la policía en el departamento, Calderón Aranda presentaba dos impactos con arma de fuego en su cuerpo. Así mismo, Lamprea afirmó que las primeras indagaciones del caso indican que las causas estarían relacionadas con “ajustes de cuentas por temas de narcotráfico”.
De acuerdo con información suministrada por el Comité Permanente para la Defensa de los Derechos Humanos (CDPH) en Caquetá, el firmante de paz se encontraba en proceso de reincorporación desde el año 2016 e hizo dejación de armas en el Antiguo Espacio Territorial Agua Bonita en el municipio de La Montañita, Caquetá, aunque actualmente residía en la ciudad de Bogotá.
Pese a lo señalado por la policía, Mario García integrante del CDPH hizo un llamado a las autoridades competentes a proteger la vida y esclarecer este hecho y el de los 25 excombatientes asesinados en el departamento desde la firma de los Acuerdos de Paz entre el Gobierno Nacional y la desmovilizada guerrilla de las Farc.
“Esto nos llena de incertidumbre de lo que está sucediendo. El ejército lo que ha hecho es generar una cortina de humo y descontextualizar los asesinatos de líderes y lideresas y de excombatientes que decidieron apostarle a la paz” resaltó García.
De acuerdo con la Policía se adelantan las investigaciones para dar con los responsables del caso. Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, desde el 216 han sido asesinados 284 excombatientes en el país.