Desde hace más de 11 años, el profe Luis Alfonso Leyva Botyay, indígena de la comunidad Murui Muina, coordinador de deporte de la Asociación de Cabildos Indígenas de Leguízamo y Alto Predio Putumayo y líder deportivo municipal, viene pasando la pelota de generación en generación a través de su club llamado "Maloca", que tiene un gran significado ancestral.
Para Leyva, Maloca significa "templo de Dios donde hay enseñanza, formación, consejo, sabiduría y principios desde la espiritualidad ancestral", oportunidad que viene brindando a los niños, niñas y adolescentes mediante la disciplina del fútbol, con el objetivo de cultivar valores como el compañerismo, el respeto, la tolerancia, la empatía, la responsabilidad y el amor, formando jóvenes que aporten a la sociedad y le saquen tarjeta roja a todo hecho de violencia que ocurra en sus entornos.
Sede del Club deportivo "Maloca" categoría B (8 a 10 años), Leguízamo- Putumayo.
"Nosotros fuimos la primera escuela de fútbol en el municipio, actualmente hay tres e incluso algunos grupos desde la escuela de formación de la alcaldía, pero nosotros iniciamos este trabajo en el municipio, donde llegamos a tener 200 niños y niñas porque era la única opción que tenían para su libre esparcimiento", señaló Leyva; destacó además que dentro de su espacio deportivo llegan niños y niñas de diferentes sectores sociales con todo tipo de situaciones psicológicas y morales, resaltando los hechos que empañan y llenan de temor a la sociedad como lo es el reclutamiento forzado por grupos armados, violencia contra menores, problemas familiares, violencia intrafamiliar, niños huérfanos, campesinos, indígenas y afrodescendientes que han sido marcados por la banalidad del hombre.
Día de entrenamiento del club de fútbol "Maloca"
El silbato que promueve la paz
El club deportivo Maloca está legalmente constituido e inscrito en cámara y comercio, cuenta con un manual de convivencia y un portafolio de servicios de acuerdo a las necesidades del municipio de Leguízamo, que ha venido aportando a los menores un desarrollo psicomotor, enseñándoles a relacionarse, a seguir unas reglas, a trabajar en equipo, a reconocer la importancia del esfuerzo personal y a cumplir metas.
A pesar de que Puerto Leguízamo es uno de los municipios del departamento del Putumayo, donde su acceso es complejo debido a que el transporte es fluvial por los Ríos Caquetá o Putumayo, o aéreo, el Club deportivo tuvo la oportunidad de estar en la ciudad de Bogotá, participando con la Fundación Rebel del Real Madrid, el club San Carlos del Deportivo Cali, Escuela de genios del fútbol, y rodando el balón en la copa pony fútbol en tres oportunidades (2015, 2016 y 2019) dejando una huella inolvidable y de impacto para los niños y niñas que por primera vez salían del territorio.
Estadio Municipal Boricua Zarate - Categoría B de 8 a 10 años de edad.
Tarjeta amarilla por escenarios deportivos
La falta de espacios al aire libre, como las canchas de fútbol, pistas de carreras, entre otras, que incentivan a tomar hábitos saludables, ayudando a promover la integración de la comunidad, el desarrollo de comercios locales y otros ámbitos sociales son unas de las mayores dificultades que afectan el buen desarrollo de las disciplinas. Sin embargo, el club deportivo Maloca viene realizando sus entrenamientos en canchas de futsal, con sus cuatro categorías: de 5 a 7 años, de 8 a 10 años, de 11 a 14 años y jóvenes de 14 a 17 años de edad, añorando que los gobiernos venideros inviertan recursos para la juventud.
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Tarjeta roja para el orden público
En el municipio de Leguízamo, recrudecen situaciones que atentan contra el buen vivir de la sociedad, especialmente de las comunidades indígenas.
El Observatorio de la Coordinación de Derechos Humanos y la comisión de Derechos humanos de los Pueblos Indígenas presentaron en el mes de mayo de 2023 un reporte de las afectaciones a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario de los pueblos indígenas de la Amazonía Colombia, siendo los departamentos de Guainía, Guaviare y Putumayo los que evidenciaron el mayor número de casos por desplazamiento forzado individual, desalojo y reclutamiento de menores, uno de los más denunciados por los pueblos: Kofán, Embera, Kichwa y Murui Muina, quienes son los más afectados.
Coliseo Cubierto Maracaná, Puerto Leguízamo.
Sigue rodando el balón de la paz
El llamado que el Club deportivo Maloca junto con los niños, niñas y adolescentes hacen a las autoridades, administraciones e instituciones, es a promover el deporte a través de infraestructuras deportivas adecuadas, personal capacitado y campañas que promuevan los buenos hábitos saludables, permitiéndole a los menores tener otros entornos de aprovechamiento del tiempo libre.
Y es así como el profesor Luis Alfonso Leyva sigue rondando el balón de la paz, promoviendo el fútbol en los jóvenes del municipio. "Es preocupante la situación, la verdad realmente es muy necesario que las instituciones intervengan, a mí personalmente me impacta mucho, me duele mucho, por eso hago este trabajo, no importa lo que me gaste, yo no pienso en mi bolsillo, no pienso en mi bienestar, yo pienso es en el bienestar de los jóvenes y los niños de mi municipio, porque detrás de mi trabajo deportivo, hay un gran trabajo social", señaló.