Durante una visita humanitaria que realizó el defensor del Pueblo Carlos Camargo, al departamento del Chocó, el funcionario dio a conocer la Alerta Temprana de Inminencia 020- 21, para los municipios de Medio San Juan e Istmina, en la que se advierte de la situación de desplazamiento forzado, confinamiento, homicidios y elevado riesgo de enfrentamientos.
La situación se viene presentando principalmente en los municipios de Litoral del San Juan y Medio San Juan, y según la alerta, está en riesgo la población afrocolombiana perteneciente a los Consejos Comunitarios de Acadesan, Cocominsa y al Resguardo Indígena de Unión Wounaan, La Lerma y Macedonia del Pueblo Wounaan.
Señala la Defensoría que desde el pasado 15 de agosto, hay combates entre el Eln y las Agc, luego de la terminación de un pacto entre esos dos grupos armados, que había iniciado en el 2017 por el control del territorio, por las rentas de las economías ilegales, cadena del narcotráfico, cultivos de uso ilícito, procesamiento de coca, y extracción ilícita de recursos naturales (minería y exploración de madera), entre otras actividades.
De acuerdo con la Defensoría, los enfrentamientos en la actualidad se dan porque las Agc buscan entrar a territorios que venían siendo controlados por el Eln, y de este grupo hacia territorios de dominio de las Agc. Según la entidad, el 12 y 13 de agosto las Agc ingresaron a la comunidad de la Unión de Dipurdu y El Guasimo, en el municipio de Medio San Juan, donde pintaron las viviendas con logos alusivos al grupo armado ilegal y retuvieron e interrogaron a civiles.
Asimismo la advertencia defensorial advierte que el 14 de agosto, el Eln asesinó a un civil en cercanías de la comunidad de Negría (Istmina), según las denuncias, porque habría sido acusado y señalado de ser informante de las Agc. Al día siguiente, el 15 de agosto, hubo combates entre el Eln y las Agc en la parte alta de la comunidad de Dipurdú, lo que originó que aproximadamente 965 familias y 1.227 personas se desplazaran hacia la comunidad de San Miguel.
Otras familias se habrían desplazado de la comunidad la Unión (Medio San Juan), al municipio de Istmina; mientras que al menos 1.391 personas pertenecientes a las comunidades de la Unión, San Miguel e Isla de Cruz, se encuentran confinadas.
“Aunque algunas familias han logrado llegar hasta la cabecera municipal de Medio San Juan y a Istmina, el riesgo de desplazamiento forzado sigue latente mientras persistan las acciones de los grupos armados contra la población civil. Por esta razón, desde la Defensoría del Pueblo hago un llamado a las autoridades para fortalecer la presencia institucional, y para garantizar los derechos de los habitantes de una de las regiones más golpeadas por la violencia”, manifestó el defensor Carlos Camargo.