Este 16 de septiembre, la Fiscalía General de la Nación llamará a juicio al mayor Jorge Mario Molano, señalado de ser el responsable del homicidio del joven Santiago Murillo, en medio de las marchas del 1 de mayo en Ibagué.
De acuerdo con el ente acusador, Molano le habría disparado a Murillo, quien no participaba en las protestas, sin que fuera necesario, pues el joven no representaba un peligro para el oficial y de paso desconoció las directivas de la Policía sobre el uso de las armas.
De hecho, la Fiscalía General resaltó que, tras dispararle al joven, ningún policía lo socorrió, pese a que en ese momento la situación de orden público no estaba crítica y por lo tanto los uniformados podían colaborarle a Murillo.
“La muerte de Santiago se perpetra con un desconocimiento completo de los protocolos para el manejo de la protesta pública, de lo que Molano tenía conocimiento con un quebrantamiento completo del decálogo de las armas, un desconocimiento total de los derechos humanos, a la dignidad humana, a los tratados internacionales a la Convención Interamericana de Derechos Humanos”, indicó el ente investigador.
El oficial suspendido participará en la audiencia desde la cárcel Picaleña de Ibagué, donde se encuentra detenido mientras avanza el proceso en su contra. Desde allí insistirá en su inocencia una vez más, mientras que la Fiscalía buscará que sea condenado por homicidio agravado.
Así las cosas, Molano se convierte en el primer uniformado llamado a juicio por las muertes durante las protestas que se dieron en el marco del paro nacional, que inició el 28 de abril de este año