A la cárcel presuntos implicados en homicidio de Michelle Amaya en Bogotá
Por los delitos de homicidio agravado, tortura agravada, concierto para delinquir, hurto calificado y agravado y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, este lunes fueron enviados a la cárcel los presuntos vinculados al asesinato de la menor de 15 años, Lynda Michelle Amaya.
Los sujetos, que harían parte de una estructura criminal que opera en el barrio San Bernardo de Bogotá, fueron identificados como: José Francisco Daza Alarcón alias ‘Chepe’, Wilmar Andrés Daza Alarcón alias ‘Andrés’, Juan Carlos Mendivelso Ibáñez alias ‘Juan Carlos’, Edinson Cervera Guarnizo alias ‘Pirry’, Jakeline Cala Nieves, alias ‘Jakeline’ y Lady Johana Guzmán, quien es compañera sentimental del cabecilla del grupo delincuencia ‘Tazmania’.
Las audiencias se realizaron ante el Juzgado 52 Penal Municipal de Bogotá, todos los investigados (excepto alias ‘Pirry’) admitieron su responsabilidad en los delitos imputados de homicidio y tortura de la menor, luego de que la Fiscalía con apoyo de la Policía Metropolitana de Bogotá (Sijín), lograra obtener los elementos probatorios para una orden judicial que diera lugar a las capturas.
Según el relato de los hechos presentado por la Fiscalía, Lynda Michelle salió de su casa ubicada en el barrio Prado Veraniego y llegó hasta el barrio San Bernardo en la localidad de La Candelaria, donde al parecer esperaba recuperar un celular que le habían robado. Allí fue donde, al parecer, alias Pirry dio la orden de torturar a la adolescente.
El cuerpo de la menor fue trasladado el 1 de diciembre de 2020 a Medicina Legal. No fue identificada sino hasta el pasado 9 de enero, cuando Natahlie Amaya, madre de Michelle reconoció el cuerpo en una segunda visita, puesto que según cuenta Amaya, la primera vez que se acercó le dijeron que no tenían registro de alguna persona con las características de su hija, sino de una mujer de entre 19 y 23 años.
La familia de la víctima alega que hubo una posible negligencia en la búsqueda de la menor, pues su búsqueda solo inició tres días después de desaparecida.
