El periodista Heber López Vásquez del medio mexicano RCP Noticias ha sido asesinado en la noche de este jueves en el barrio Espinal de Salina Cruz, ciudad mexicana de Oaxaca, capital del estado homónimo, tras recibir varios disparos por arma de fuego, siendo el sexto asesinato contra la prensa en lo que va de año.
El fiscal de Oaxaca, Arturo Peimbert, ha informado que la Policía de Salina Cruz ha logrado detener a dos personas que se habían dado a la fuga tras el asesinato, cometido contra el periodista en el interior de su estudio de grabación, según han informado el propio medio del periodista y el diario mexicano 'Milenio'.
"Estamos a la espera a que se pongan a disposición del Ministerio Público para empezar las diligencias correspondientes. Tenemos la escena del crimen asegurada. Aunque tenemos a los autores materiales no descartamos ninguna línea de investigación", ha dicho Peimbert en una conexión telefónica con 'Milenio'.
"Lamentamos informar el fallecimiento de nuestro amigo y colega periodista Heber López Vásquez. Fue privado de su vida esta noche en barrio Espinal de Salina Cruz, en Oaxaca, al interior de su estudio de grabación", ha dicho el medio en Twitter, agregando que están "consternados" ante tal situación.
Heber López Vásquez había recibido amenazas por sus publicaciones en las que denunciaba actos de corrupción de funcionarios locales, según informa el 'Diario de Yucatán'.
En lo que va de año, seis periodistas han sido asesinados en México. José Luis Gamboa en el estado de Veracruz; Roberto Toledo en Michoacán; y el fotoperiodista Margarito Martínez Esquivel, Marco Ernesto Islas y Lourdes Maldonado, los tres en Tijuana.
A finales de enero, las asociaciones, los periodistas y la sociedad civil mexicana convocaron varias jornadas de protesta para demandar responsabilidades por la muerte violenta de periodistas en México.
El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) ha informado de que, en los últimos 30 años, cerca de 140 periodistas han sido asesinados en México, lo que convierte al país en uno de los más peligrosos para ejercer la profesión.