La Fiscalía venezolana culpó a los grupos armados ilegales colombianos de las masacres, el sicariato y la violencia en el país vecino. Además, anunció la detención de 36 integrantes de organizaciones guerrilleras en la región fronteriza de Apure.
El fiscal general del oficialismo, Tarek William Saab, denunció que grupos terroristas colombianos han buscado a políticos influyentes venezolanos con inmunidad para traficar drogas y desestabilizar a Venezuela a través del control territorial.
“Colombia también ha exportado a nuestro país la lógica de las mega bandas y los pranatos, que ejercen control territorial en barrios y zonas rurales a punta de terror. Se trata de un equivalente a las Bacrim y los grupos paramilitares. Han intentado permear este modelo en nuestra sociedad y ya no solo pretenden captar adolescentes, ahora intentan captar niños”, denunció Saab.
En su arremetida contra Colombia, Saab además aseguró que el objetivo de estas acciones de estos grupos armados es descabezar el Estado y generar un conflicto armado en el país para alterar la paz. “Como el que ha existido en Colombia desde 1960”, denunció sobre el supuesto refugio y apoyo a los criminales. En su descargo también recordó que Colombia es el mayor productor de cocaína del mundo y que su producción no ha disminuido en las últimas dos décadas.
Estas polémicas declaraciones que responsabilizan directamente a Colombia por la ola de violencia y narcotráfico, terminaron con un autoelogio a su gestión y al ejército venezolano.
“En las últimas semanas, hemos visto cómo el Estado venezolano ha dado poderosos golpes a todas estas estructuras criminales que han permeado nuestro país. La Banda del Koki fue desmantelada definitivamente y su líder dado de baja”, puntualizó.