Exintegrantes de las extintas Farc se encontraron presencialmente con las familias de las víctimas, con el fin de reconocer su responsabilidad en el asesinato y secuestro del gobernador de Antioquia de la época, Guillermo Gaviria Correa y su asesor de paz, Gilberto Echeverri Mejía, el 21 de abril de 2002.
Los funcionarios fueron secuestrados por quienes en ese momento eran miembros del frente 34 de las Farc, en el sector del Puente El Vaho, a cinco kilómetros de Caicedo, Antioquia.
El secuestro ocurrió durante una marcha pacífica que buscaba el cese de las acciones violentas contra la población civil, y sus asesinatos se habrían dado por ser seguidores del movimiento ‘NoViolencia’.
“Aquí en Caicedo nadie puede decir que no hay una víctima de la violencia. En esos tiempos todo quedaba echando humo. Parecía como en las películas”, cuenta Germán Darío Rodríguez, habitante del municipio que vio por última vez a estos dos dirigentes políticos.
Según el Observatorio de Memoria Conflicto: Antioquia es el departamento de Colombia más golpeado por el secuestro, pues el 20 % de las 37.165 víctimas de este delito, registradas en el país entre 1958 y 2018, corresponden a esta región.
Para la Comisión de la Verdad “estos asesinatos impactaron profundamente la democracia y la institucionalidad del país, y lesionaron de forma irreversible las movilizaciones por la paz y la 'NoViolencia' en este punto”, pues para la fecha se estaba viviendo un fracaso tras un acuerdo de paz fallido entre el gobierno de Andrés Pastrana y este mismo grupo.
“Cuando la población civil encontró que la existencia misma estaba en riesgo, un grupo de líderes: la iglesia, la Alcaldía, la comunidad, se organizaron con el fin de proteger… Entonces la gente salía con camisetas y banderas blancas, sin armas. El arma de la palabra”, es lo que relata Edilia González, integrante de Idepaz, en el desarrollo de este encuentro liderado por la Comisión de la Verdad, el cual busca reconocer las responsabilidades que hasta hoy, 19 años después se desconocían.
En este evento, que inició sobre las 9 de la mañana y, que todavía continúa, hay presencia de victimarios. Inició en Caicedo en septiembre del año pasado y han participado al menos 150 personas que seguían esperando respuestas para comprender todo lo que sucedió en este departamento.
El proceso de reconocimiento de secuestro en Antioquia ha contado con el apoyo de la Gobernación de Antioquia, la Alcaldía de Medellín, la Alcaldía de Caicedo, la Personería de Caicedo, la Misión de Verificación de la ONU, Conciudadanía, Videpaz y la Mesa Municipal de Víctimas de Caicedo.